Agentes de la unidad del Seprona de la Guardia Civil se encuentran investigando la aparición de miles de bolitas de poliestireno expandido (poliespán) en las inmediaciones de la playa de Samil y en la desembocadura del Lagares. Fueron los vecinos del entorno los que dieron la alarma ante la aparición del material, que podría llegar a afectar a la fauna y ecosistema de la ría, especialmente por su compleja retirada.

Fuentes municipales confirmaron que operarios del Concello llevan varias jornadas trabajando en su retirada, que tiene que hacerse de forma manual debido a que las máquinas no son capaces de sacarlas de la arena debido a su pequeño tamaño.

Desde el Concello barajan la posibilidad de que se trate de restos prodecentes de un barco, si bien desde el Instituto Armado sopesan otras posibilidades.

Lo cierto es que los vertidos es ambos emplazamientos se han reducido de forma drástica en los últimos años por el exhaustivo control de Medio Ambiemte. En el caso del Lagares, en los últimos cinco años, el Ayuntamiento ha abierto un total de 43 incidencias relacionadas con residuos que no deberían tener en el río su aliviadero. Los técnicos de la concejalía cumplimentaron 17 expedientes en el mismo periodo y registraron otras 26 intervenciones en las que, habiendo recibido avisos por la existencia de alguna anomalía, esta fue leve o había desaparecido en el momento de la actuación.