Delegadas sindicales de la CIG se concentraron ayer delante de la residencia de mayores Ballesol de Vigo para rechazar el despido disciplinario de una trabajadora por solicitar medidas de conciliación laboral y familiar. La CIG denuncia que el cese se produjo "sin otra razón que la de ser madre, separada y con la necesidad de conciliar su trabajo con el cuidado de su hija de cuatro años".