La convocatoria de las ayudas para familias, destinadas a evitar los desahucios, abrió ayer tras ser publicada en el Boletín Oficial de la Provincia y anunciada por el alcalde, Abel Caballero. "Estamos en plazos de forma extraordinaria, no pudo ser antes, se tiene que tramitar en el año y tarda un mes, pero llevamos cinco meses de adelanto respecto a otros años", aclaró el regidor vigués.
El gobierno municipal destinará 1.500.000 euros para estos subsidios que socorren los gastos de alquiler, alimentación y suministros de las familias olívicas que dispogan de escasos recursos. Este año, en el caso de los desahucios, la partida se elevará un 25% para cubrir los gastos de los alquileres. "Los precios subieron, la vida es más cara y por lo tanto queremos proporcionar ayudas a viviendas que tienen una renta más cara porque, desde que empezamos este programa hasta ahora, los arrendamientos subieron", apuntó Caballero.
La finalidad de estas ayudas es la de apoyar a aquellas personas y familias que carecen de recursos económicos suficientes para afrontar una situación de emergencia social y que podría derivar en exclusión.
