Las obras para la construcción del túnel que conectará la céntrica calle Lepanto con la autopista AP-9 comenzarán en marzo. Así lo comunicó ayer el alcalde, Abel Caballero. Los trabajos, con un presupuesto de licitación de 11,8 millones de euros, se extenderán a lo largo de 17 meses y se adjudicarán "en unos días" tras pasar por la Junta de Gobierno "de forma inmediata".

El regidor concretó que esta reforma -que, una vez acabada, permitirá acceder a la autopista desde la ciudad liberando una zona de habituales retenciones- provocará alteraciones de tráfico, de las que se informará en las próximas semanas y se sumarán, así, a las ya operativas en Gran Vía, en Ronda de Don Bosco y en Porta do Sol, que se corta hoy a la circulación.

Caballero señaló que la existencia de esta nueva infraestructura borrará los problemas que se generan en el puente de entrada a la autopista situado sobre la calle Alfonso XIII. "Creo que Vigo es la única ciudad de España que tiene una trampa cazacoches; es raro el mes en el que alguien no queda encajonado", detalló el primer edil en relación al último resto del Scalextric.

Por otra parte, el mandatario local avanzó que Adif "está licitando la conexión con el Centro Vialia", que "paga el 75% de la adecuación que tiene que ver con la ciudad y la totalidad del acceso" al propio centro comercial. La Xunta se encarga de casi el 4%; el Concello, de más del 21%. "En los espacios interiores, vamos a proceder a una humanización por un valor de casi 1 millón de euros: el 75% es financiado por el Gobierno central. Ahí, se incluirán la plaza de la estación y el núcleo intermodal", apuntó. Los planes de Ceetrus, la compañía que levanta el complejo ubicado en Urzáiz y diseñado por Thom Mayne a cambio de encargarse de su explotación, pasan por que el área comercial esté lista para la primavera de 2021 con una amplia oferta de tiendas, hostelería y un cine.