El juicio contra la presunta trama de contrabando de tabaco celebrado en Vigo quedó ayer visto para sentencia con cambios en la petición de la Fiscalía. El Ministerio Público retiró los cargos en relación a dos acusados: un guardia civil, A.B.P. y J.C.G.C., que fue delegado de dos empresas de suministro a buques de mercancía libres de impuestos. Mantiene su petición para los otros cuatro procesados. La Abogacía del Estado, por su parte, no hizo modificaciones y acusa a las seis personas que se sentaron en el banquillo. Las defensas solicitan la absolución.
La trama supuestamente consistía en simular el suministro a buques de cartones de tabaco exentos de aranceles e impuestos, aunque en realidad la mercancía acababa fuera de los circuitos legales. El guardia civil al que exculpa el fiscal solo fue identificado una vez y, en el caso del empresario, la defensa aportó documental alegando para defender su inocencia que los suministros supuestamente irregulares a barcos siguieron cuando su cliente ya no era delegado de la compañía.
Sobre los otros cuatro acusados, el fiscal mantiene su acusación por delitos de falsedad y contrabando de tabaco: se trata de otros dos agentes, F.R.B. y J.V.B., y un comercial de Marín ya jubilado y su hija, J.J.T.C. y E.E.T.V., que trabajaban en el suministro a buques. Solicita hasta 5 años de prisión e indemnizar a la Agencia Tributaria con 1,7 millones.
