La proliferación de patinetes eléctricos en Vigo sigue motivando actuaciones policiales. Como ocurrió este pasado fin de semana, en el que hubo dos casos. Uno fue a las dos y media de la tarde del sábado en la calle Pi y Margall. Tras la alerta de un atropello, los agentes vieron que el herido no era un peatón, sino el usuario de un patinete, de 23 años. Tras ser asistido por los sanitarios de una ambulancia, los policías vieron que el chico tenía "claros síntomas" de estar bajo los efectos del alcohol. Dio 0,70 y 0,74 en la prueba de alcoholemia. Según la Policía Local, todo apunta a que invadió el cruce con Menéndez Pelayo sin respetar el semáforo, impactando con un turismo que giraba con el semáforo en verde. Los agentes creen que el joven iba en VMP porque tiene retirado el permiso de conducción.

Y también ese sábado, pero por la mañana y en la zona de Torrecedeira, la Policía Local sorprendió a una joven de 23 años que circulaba por la acera a "elevada velocidad". Fue denunciada en vía administrativa por ir por la acera.