Buena parte de la calle Gregorio Espino ya luce engalanada a raíz de la intensa humanización de la que está siendo protagonista. El alcalde Abel Caballero y parte del gobierno local acudió ayer hasta las inmediaciones de O Calvario para la inauguración de la tercera fase de estas obras de remodelación del vial que anexiona Travesía de Vigo con la Estación de Autobuses, Avenida de Madrid o la circunvalación.

El ayuntamiento vigués invirtió en esta última fase hasta 1,4 millones de euro destinados a la adecuación del pavimento, aceras de granito, renovación del saneamiento y abastecimiento, también mejoras en la red de alumbrado, semafórica y de riego por goteo, sumando también ahora hasta 140 m2 de superficie ajardinada en las aceras. Esta actuación comprende desde la rotonda de Travesía de Vigo hasta el cruce con Urzáiz y en el tramo de la Avenida comprendido entre los cruces con las calles San Roque y Reiseñor.

En estas tres fases de las humanizaciones se han invertido ya por el Concello de Vigo hasta 2,3 millones de euros, que continuará hasta completarla en sucesivas fases, según confirmó el alcalde vigués. Caballero subrayó lo "importante" de esta obra ejecutada "en una de las grandes avenidas de Vigo", en un espacio de la ciudad "tan habitado" que hasta el momento se encontraba "en situación lamentable".

Junto a este proyecto de humanización se encuentran también programados otros entre García Barbón y Rosalía de Castro y en el nudo de Isaac Peral y Gran Vía, en tres de sus tramos, si bien desde el gobierno local critican que sus obras se encuentran "paradas" y a la espera de un procedimiento contencioso. Sostienen que esta situación se trata de una "decisión política" de la Xunta para "impedirnos" hacer humanizaciones en la ciudad. "No solo no invierten en Vigo sino que hacen un gesto cínico de despotismo impidiéndonos hacer humanizaciones que tenemos presupuestadas, programadas y con todo preparado para iniciarlas", aseguran.