La Policía Nacional continúa con las diligencias abiertas el lunes a raíz del hallazgo, junto a un contenedor en la plaza de Eugenio Fadrique de Vigo, de más de 140 cajas de medicamentos. Un grupo de jóvenes que encontró los fármacos mezcló algunas de esas pastillas con alcohol y uno de ellos fue hospitalizado tras ingresar en estado comatoso. Pese al gran número de envases, fuentes de la comisaría referían ayer que la principal hipótesis apunta a que sería un particular el que los dejó en la calle. En todo caso, tanto fuentes policiales como judiciales -el atestado llegó al Juzgado de Instrucción número 2 que estaba de guardia el día de los hechos- indican que en esta conducta no habría materia penal.

La recomendación existente para los ciudadanos es que los medicamentos caducados o sobrantes se dejen en los puntos SIGRE de las farmacias. Pero no hacerlo, inciden en la comisaría viguesa, no es delito. En todo caso, y debido al gran número de fármacos hallados, entre ellos derivados de opiáceos y vasodilatadores, los agentes quieren comprobar de donde procedían esas pastillas. Para ello, se está siguiendo la trazabilidad de los productos para ver si es posible aclarar esta cuestión con el "posible rastro" que pudieron dejar los códigos de barras de los envases.

El hallazgo de los medicamentos se produjo la madrugada del lunes a raíz de que un grupo de 12 jóvenes -11 menores de edad- los consumiesen con alcohol. Uno de los chicos fue hallado tirado en la calle por una ambulancia del 061, que lo trasladó al hospital. Aquella misma tarde ya estaba en planta fuera de peligro. El resto de chavales que ingirieron la peligrosa mezcla fueron posteriormente localizados por la Policía Nacional.