Un menor de Vigo se encuentra ingresado en Povisa después de ingerir y mezclar con alcohol una serie de medicamentos que se habría encontrado tirados junto a un contenedor de basura en la Plaza Eugenio Fadrique.

Otros 11 jóvenes, con edades comprendidas entre los 14 y los 17 años, así como un mayor de edad, fueron localizados por la Policía después de probar la misma mezcla de opiáceos, vasodilatadores y anticoagulantes con bebidas alcohólicas. Al menos uno de ellos fue atendido en Urgencias del Hospital Álvaro Cunqueiro pero su estado era bueno por lo que no tuvo que ser ingresado.

Los hechos ocurrían pocos minutos después de las 03:00 horas de la madrugada del domingo cuando los sanitarios de una ambulancia del 061 atendían al joven intoxicado que se encontraba tirado en la calle, en la avenida de Florida, cuando sufría una parada cardiorespiratoria que, en un primer diagnóstico determinaron que había sido provocada por el consumo de opiáceos y antidepresivos.

Once jóvenes intoxicados

Después de dar parte a la Policía Nacional, los agentes desplazados al Álvaro Cunqueiro preguntaron al personal sanitario si tendrían la oportunidad de hablar con él, aún estando sedado, porque temían que el menor hubiese consumido los medicamentos y el alcohol en compañía. Los médicos accedieron a la petición no sin antes indicarles que las respuestas podrían ser inconexas e incoherentes.

Poco a poco obtuvieron el nombre de varios amigos y tras consultar la agenda del móvil del menor pudieron contactar con uno de ellos. Este les informó que hacía pocas horas que habían mezclado diversas pastillas y alcohol.

Con el tiempo en su contra porque la mezcla de alcohol con anticoagulantes, vasodilatadores y opiáceos puede resultar mortal, se puso en marcha un dispositivo para localizar a la mayor brevedad al resto de los menores que hubiesen ingerido los fármacos que habían encontrado junto a un contenedor de basura.

En el lugar de los hechos se recogieron casi 140 cajas de medicamentos y los llevaban al hospital para que el personal de área de toxicología pudiera determinar qué tipo de tratamiento debían de aplicar a los menores que iban llegando. Finalmente se localizó e ingresó a 11 menores, con edades comprendidas entre los 14 y los 17 años, así como un mayor de edad, además de contactar con otros 2 jóvenes que estaban en ese grupo pero que no habían consumido nada.