Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La resistencia del "gym" más femenino

Woman Fitness es el único centro deportivo femenino que resiste en Vigo tras los cinco ya cerrados

Algunas usuarias durante una clase de zumba dirigida por Vanesa Pérez. // Alba Villar

Hace un cuarto de siglo, Vigo acogió el primer gimnasio femenino de su historia ubicado en O Calvario. Tras él surgieron cuatro más que cerraron con el paso del tiempo siendo, desde hace tres años, Woman Fitness el único local deportivo dirigido a mujeres que está abierto en la urbe.

Isaura Costas comenzó su andadura deportiva en el primer centro femenino que hubo en la ciudad. También desempeñó su trabajo como monitora en múltiples centros mixtos y, durante ocho años, fue instructora en un local de López Mora hasta que tuvo la oportunidad de montar su propio gimnasio solo para mujeres. "Mi ilusión siempre fue tener un centro y para poder llegar a competir con las grandes empresas tenía que ofrecer algo distinto", declara la creadora de Woman Fitness, Isaura Costas.

La mayoría de clientas acuden al centro de Martín Echegaray en busca de desconexión. En su libreta de inscripciones constan 102 matriculadas procedentes de todas las partes de la ciudad. "Muchas se sienten más cómodas porque las miradas masculinas a veces las incomodan, entre ellas se sienten más libres", comenta la monitora de zumba, Vanesa Pérez. "Hoy en día, en Vigo hay mujeres de diferentes religiones y algunas acuden al centro porque no hay chicos", añade Isaura Costas.

Carmen y Teresa asisten cada día al gimnasio para hacer deporte, relacionarse y divertirse. "En un ambiente mixto estás más pendiente de si te aprieta o si se te sube la ropa, aquí estamos en casa. De joven me daba igual, pero ahora prefiero rodearme de mujeres", afirma Teresa García tras su clase de zumba. "Yo empecé en un momento en el que necesitaba aislarme de todo, esto es mi refugio a nivel personal y aquí somos todas amigas", apunta risueña Carmen Pérez.

La filosofía de este centro deportivo es la de orientar todos los esfuerzos en mimar a las usuarias. "A las clientas hay que ganárselas y tratarlas bien. Pongo muchos descuentos a lo largo del año y si alguna está en situación de dificultad económica o en paro se le hace un descuento hasta que supere ese bache", asegura Isaura Costas.

La especialización en un solo género permitió a Isaura centrar todas sus actividades en conocer el cuerpo femenino y ajustar cada entrenamiento a su anatomía. "Los ejercicios son distintos, el hombre tiene más fuerza y las ellas tienen más aguante", explica Isaura Costas. "Las mujeres van más a clases dirigidas y hacen menos trabajo de sala. Aquí viene más gente de treinta años para arriba, y la gente joven hace más zumba o trabajos de fuerza", añade.

Las claves para ver resultados en el deporte son el sacrificio y la superación. "La mayoría de las clientas que vienen con frecuencia dicen que se encuentran mejor. Tengo una señora de 81 años que antes no se daba sentado en el suelo y, tras tres meses viniendo a pilates ya lo consiguió", destaca Isaura Costas.

El cuidado a sus clientas también se traslada a sus familias. La conciliación es una asignatura pendiente a la que la gerente del gimnasio Woman Fitness quiere ponerle solución: "A veces en verano hacemos cursos para niños y quiero ofrecer pilates postparto para que puedan venir las madres con sus bebés".

Compartir el artículo

stats