La Xunta plantea eliminar 5 de los 9 edificios incluidos en la parcela de la ETEA cuyos usos complementarán al campus científico-tecnológico y estima en 3 millones de euros el presupuesto básico de ejecución. El plan sectorial del ámbito PS-6, que superó el pasado junio el informe ambiental estratégico, permanecerá expuesto a información pública durante un mes para que administraciones, instituciones y ciudadanos presenten alegaciones, tal y como ayer publicaba el Diario Oficial de Galicia.
El área a urbanizar, situada entre las instalaciones deportivas y la plaza de Armas, tiene una superficie de 21.199 m2 y albergará usos relacionados con la investigación y sus servicios, además de socioculturales, dotacionales, deportivos y de gestión e innovación empresarial.
La Xunta cifra en 7,3 millones de euros el valor del suelo y las edificaciones de la parcela. Su desnivel constituye uno de los principales condicionantes de la propuesta, que tiene como objetivo recuperar las "relaciones de continuidad" entre las distintas plataformas, mantener la integración paisajística y conservar el carácter militar que tuvo durante 70 años.
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La propuesta contempla una edificabilidad máxima de 14.600 m2 y un mínimo de 67 plazas de aparcamiento, además de respetar los viales de acceso a las diferentes plataformas, que serán reajustados y reurbanizados. Se potenciará la circulación peatonal y se renovarán las escaleras existentes.
El edificio Morse y la Enfermería, los únicos catalogados en el plan sectorial como elementos del patrimonio cultural a conservar, albergarán usos socioculturales y servicios de gestión e innovación empresarial.
La Xunta también plantea respetar y rehabilitar la residencia de suboficiales Álava y la Liniers por su "valor arquitectónico singular dentro del conjunto", destacando los muros de carga de sillería y sus "cualidades compositivas e identitarias de la arquitectura militar".
Varios de los edificios del ámbito PS-6 tienen su origen en nueve barracones que fueron reformados a partir de los años 50. Los tres más cercanos al litoral se demolieron para poder construir el Faraday. Los dos siguientes se unieron y reformaron para habilitar en su lugar la Enfermería. Los tres restantes se convirtieron en un inmueble de aulas y el noveno dio lugar al edificio Patiño.
La Xunta propone eliminar estos dos últimos para ampliar los espacios contiguos y "poner en valor" el Morse y la Enfermería, que permanecería como "testimonio histórico y arquitectónico" de los antiguos barracones.
También serían demolidos el cuartel José Luis Díez, un "elemento discordante" que supondría una barrera para la comunicación desde los espacios deportivos hasta la playa; el Méndez Núñez, para dar cabida a nuevas edificaciones más adecuadas; y el cuerpo e guardia, cuyas dimensiones no se ajustan a las necesidades del ámbito.
A igual que en la propuesta del ámbito PS-2, el derribo de los cinco inmuebles es el principal punto de desacuerdo con el Concello vigués, que reclama a la Xunta otras alternativas que tengan en cuenta la conservación de todas las edificaciones "del conjunto catalogado de la ETEA". También echa en falta que se concrete "el grado de conservación" de la vegetación existente, dados sus "extraordinarios valores naturales, botánicos y paisajísticos".
La Universidad de Vigo, por su parte, alega que el uso principal del ámbito debería ser docente e investigador, y el resto tendrían que tener un carácter complementario o ser eliminados. Y la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural recomienda que el catálogo del plan sectorial incluya las residencias Álava y Liniers.
