El Gobierno local da un paso clave para aprobar las cuentas "récord" de 2020 y convertirse en la primera gran ciudad de España en despejar sus finanzas para el próximo ejercicio. El PSOE hizo valer ayer su holgada mayoría en el pleno para validar unos presupuestos de 267,7 millones de euros, los decimoterceros que encadena Caballero como alcalde y que -al elevarse un 4,1% con respecto a 2019- se convertirán en los mayores de la historia de Vigo. Lo hizo, eso sí, con el rechazo de los tres grupos de la oposición, PP, BNG y Marea, que criticaron varias cuestiones. Los populares, por ejemplo, cargaron contra la subida de impuestos y lamentaron lo que consideran un bajo nivel de ejecución de las inversiones. Bloque y Marea, a su vez, pusieron énfasis en exigir un mayor esfuerzo en políticas sociales. Críticas que el Gobierno ataja reivindicando el impacto que tendrán las cuentas. "Es un presupuesto inversor y social para el progreso imparable de la ciudad", recalcaba poco después el alcalde, Abel Caballero.

"Estos presupuestos son equilibrados, no solo en términos de ingresos y gastos. También atienden a la política social, inversiones, necesidades educativas...", argumentó Aneiros: "Colocan a Vigo en la vanguardia de la política social y del empleo". El edil de Facenda insistió en que el capítulo de política social se incrementa en 1,5 millones hasta alcanzar los 17,7, cantidad que incluye las partidas para el programa de Coidadores de Barro (540.000 euros), contra desahucios (2,5 millones) o ayudas para libros y comedor (1,8 millones). También incidió en que el área de educación reforzará su inversión en 900.000 euros hasta alcanzar los 15 millones; o que Empleo repuntará un 13,1% hasta dejar su dotación en más de 6 millones.

Durante las dos intervenciones que realizó en el pleno, monográfico y que duró apenas 45 minutos, Aneiros subrayó que el Concello de Vigo disfruta de deuda cero, que las exenciones fiscales de las que disfrutan los ciudadanos suman 17 millones de euros y que la presión fiscal por vecino -496 euros- es muy inferior a lo que recibe en gasto municipal. "Es un presupuesto muy social", defendía el primer edil una vez concluido el pleno.

El portavoz del PP, Alfonso Marnotes, censuró sin embargo la política fiscal del Gobierno local. "Hay una subida del presupuesto de unos diez millones que se basa en el aumento de los tributos municipales", censuró el popular. Según los datos anunciados por el Concello a principios de septiembre, el IAE, rodaje y la recogida de basuras o la grúa se encarecerán un 2,5%, mientras el IBI subirá un 1%. Marnotes censuró ayer que desde 2007 los ingresos tributarios crecieron al rededor de un 20%.

"A los ciudadanos se nos pide más. Y en un momento de incerteza", advirtió el portavoz de los populares, muy crítico también con los niveles de cumplimiento presupuestario. "El Gobierno local no ejecuta y los vigueses pagan", zanjó. Según detalló Marnotes, debido a esa razón se alcanzará un superávit de 30 millones. "propusimos bajar los impuestos, pidiendo también bonificaciones para las empresas que generan riqueza y empleo. Es importante no incrementar la carga fiscal", abundó.

Inversión navideña

La Navidad también se coló en el pleno municipal. Desde la bancada de Marea, su portavoz, Rubén Pérez, cuestionó la elevada inversión que realiza el Concello en decoración navideña. "No estamos en contra de la Navidad, pero en este ayuntamiento hay economistas que saben analizar las tendencias y 2020 va a ser un año económicamente muy duro", señaló el edil de Marea antes de cuestionarse la "ética" de, en ese contexto, dedicar elevadas partidas al alumbrado.

Pérez planteó "una enmienda a la totalidad" y reclamó mayor participación de los vecinos y colectivos en la elaboración de las cuentas. "Hacen un rodillo con todo lo que les plantea la oposición", incidió el portavoz de Marea, que puso sobre la mesa la creación de un parque municipal de viviendas de emergencia, mayor apoyo al MARCO o ayudas al alquiler. Su homólogo del BNG, Xabier P. Igrexas, también incidió en la necesidad de reforzar la política social en los presupuestos. En total la formación nacionalista formuló más de 70 enmiendas "que recogen propuestas y demandas de movimientos sociales que el Gobierno se niega a escuchar". Entre otras, urgió ahondar en la lucha contra el machismo o la defensa del gallego. Las cuentas pasarán ahora a exposición pública para que se puedan presentar alegaciones que, si son admitidas, se tratarán en otro pleno en diciembre. En octubre el Concello anunciaba su intención de tener el plácet de las cuentas antes de 2020.