El Parlamento autonómico aprobó ayer una proposición no de ley con los votos favorables del PPdeG, el grupo Común da Esquerda y el Grupo Mixto para apremiar al Gobierno a construir una nueva autovía entre Vigo y Porriño, que sirva para conectar, de un lado la A-52 (Ourense-Madrid) y la A-55 (cuyo tramo en Puxeiros es conocido por su peligrosidad). El grupo del PSdeG y el del BNG optaron por la abstención. La iniciativa, defendida por la popular Teresa Egerique, quien aseguró que la autovía aguanta "tráficos muy intensos" y registra "un alto índice de siniestralidad".