La península morracense volvió a dar su apoyo mayoritario al PSOE, aunque el respaldo ciudadano fue menor que en las pasadas generales. Al igual que el 28A, venció en Cangas y Moaña, donde se produjo un ligero avance del PP, que le sirvió para lograr situarse como segunda fuerza en Moaña. La excepción fue Bueu, donde los populares volvieron a ser la primera opción de los vecinos.

Los socialistas volvieron a ganar en Cangas estas elecciones, con un 26,49% de los votos, y su lista fue la más votada en cinco de los diez colegios electorales del municipio. El partido de Pedro Sánchez, que recibió un total de 3.808 apoyos en la localidad -casi 600 sufragios menos que en abril- venció en el centro urbano y en parte de la parroquia de Darbo. Podemos, que había ganado en las pasadas generales en cuatro colegios bajó en esta convocatoria a dos. Sin embargo, pese a haber perdido más de 800 votos con respecto al 28A, la formación morada acaparó el 24,14% de los votos emitidos el domingo (3.469), registrando el mejor porcentaje de sufragios de las siglas moradas en Galicia.

El PP sigue siendo la tercera fuerza política en este municipio, aunque mejoró sus resultados con respecto a las Generales de abril y el partido gana cuatro puntos (hasta el 23,89%), quedándose a solo 36 votos de Podemos. El partido, que lidera desde 1999 José Enrique Sotelo, no solo volvió a afianzar su feudo en la parroquia de Aldán, de donde él es natural, sino que lo amplía a otras dos parroquias.

El BNG sigue en una discreta cuarta posición, si bien en estas elecciones mejoró resultados con un incremento de 3 tres puntos porcentuales en el conjunto de votos. Sin embargo, sus 1.476 votos (en las anteriores 1.171) no le permitieron ganar en ninguno de los colegios electorales del municipio.

Llegado a este punto es donde la debacle de Ciudadanos y el alza de Vox hicieron cambiar la situación. El partido que hasta ayer presidía Albert Rivera se hundió hasta la sexta posición, con solo 655 votos (4,56%), por detrás del partido de ultraderecha Vox (764 votos y el 5,32% del total de sufragios).

En Moaña, el PSOE también repitió la victoria conseguida el pasado 28 de abril. Aunque perdió 506 apoyos por el camino, una abstención mayor -solo votaron el 67,82% de los electores- permitió a los socialistas dominar en casi todos los colegios (17 de 18). Con ello lograron lograron 3.012 votos (27,96%).

El PP avanza, al igual que en el resto de la comarca. Aunque en términos absolutos solo gana 41 papeletas más (llegando a 2.727 sufragios), pero en términos porcentuales superó el 25% de los apoyos y sobrepasó a Podemos, que había sido la segunda fuerza del municipio hace seis meses.

Podemos pasó a ser tercera fuerza. Sus 2.141 votos suponen un descenso de 545 apoyos. En abril habían ganado en dos colegios de Moaña y ahora no consiguieron ser líderes en ningún punto.

Por su parte, el BNG es la cuarta fuerza política de Moaña en las generales con 1.297 votos, lo que supone un 12,04% y un crecimiento de 240 votos con respecto a abril.

Vox se convirtió en la quinta fuerza de Moaña en número de apoyos, logrando 223 sufragios más que en abril y superando el 5% (562 en total).

Ciudadanos sufrió en Moaña un gran descalabro electoral. Cayó en 742 votos y convenció a menos del 5% de los moañeses

Bueu fue la excepción en la comarca. El PP fue el gran vencedor de las elecciones y, a pesar de la caída en la participación con respecto al 28 de abril, ganó votos (de 2.072 a 2.102) y en porcentaje de apoyo (del 28,49% al 32,33%).

Ese ligero aumento, junto al retroceso del PSOE, le permitió ganar en la mayoría de los colegios Los socialistas, que en abril fueron la fuerza votada en seis mesas, ahora solo retienen dos y hay otras tres en la que la diferencia de papeletas entre ambas fuerzas es mínima.

En Común Podemos agudiza el descenso que ya se había detectado en los comicios del mes de abril, con una bajada generalizada en todos los colegios y que se traduce en 251 apoyos menos. Mucho mayor fue el descenso experimentado por Ciudadanos, en consonancia con lo ocurrido en el resto del Estado. La formación naranja cae en todas las mesas y en algunas de forma drástica