Libertad provisional por un delito de daños, eso sí, con medidas cautelares. El Juzgado de Instrucción 4 de Vigo, en funciones de guardia, impuso una orden de alejamiento de los edificios judiciales al vigués de 37 años que en la madrugada del pasado sábado asaltó los tribunales vigueses arrasando las dependencias de la sala de Violencia sobre la Mujer, tirando ordenadores y material de oficina, revolviendo y arrojando al suelo documentación muy sensible: expedientes de causas de violencia machista con datos de víctimas, investigados y, en definitiva, de asuntos en instrucción.
El móvil de este altercado -que ha puesto en jaque la seguridad de las instalaciones al campar el ahora investigado en torno a 20 minutos por el interior de los juzgados- respondería a una posible revancha o venganza por el archivo de un procedimiento. Su actual novia y otros familiares, que acudieron ayer hasta la calle Lalín, explicaron que pocas horas antes del suceso, el mismo viernes día 8 de noviembre, la mujer tuvo un juicio en el juzgado especializado en malos tratos a raíz de una denuncia que presentó contra su ex pareja. "Me rompió el móvil e incluso me tiró una bombona, pero la jueza no lo consideró probado y archivaron contra él", lamentaba la mujer. Esta situación habría provocado el enfado de su actual pareja, tanto que menos de 12 horas después de esta vista, reventó presuntamente de una patada la puerta de acceso o al edificio nuevo de los juzgados de la calle Lalín de Vigo. El enorme agujero le permitió acceder al hall, donde tiró una mesa y un panel informativo, y acto seguido subir hasta la cuarta planta. Abandonó el edificio, sin llevarse nada, antes de la llegada de las primeras patrullas. Después se fue a un bar próximo, en Florida, donde tras telefonear a la policía, fue detenido. Horas después fue trasladado al Cunqueiro para una evaluación psiquiátrica.
Ayer volvió a ser sometido a una revisión médico-forense. Según fuentes próximas al caso, el hombre no aclaró su motivación durante la comparecencia judicial al alegar que no recordaba lo sucedido.
Otra causa en activo
Según estas mismas fuentes, en este paso a disposición judicial también se le interrogó a otra causa abierta por un delito de daños en una vivienda que habría ocurridos pocos días antes de este suceso, tras ser identificado -que no detenido- por su presunta implicación.
Por otra parte, sobre la seguridad y vigilancia en los juzgados - donde existe una alarma conectada a la sede de la Unidade de Vixiancia de Edificios Xudicias (UVEX) en A Coruña-, tanto Xunta como TSXG continúan "ultimando" el informe para analizar lo sucedido así como certificar si saltó o no dicha alarma.
