La Universidade de Vigo ha subsanado una parte importante de la deuda contraída con el Concello por el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de los ejercicios correspondientes a los años 2010, 2011 y 2013.

Abel Caballero anunció ayer que la institución ha ingresado en las arcas municipales 2,6 millones de euros por el tributo, protagonista de un litigio que el Concello había ganado por la vía contencioso-administrativa. El alcalde añadió que el IBI restante, en torno a 3,4 millones de euros, "se va a fraccionar" para que la UVigo lo abone "en los próximos tres años".

"Es un buen acuerdo que significa que a partir de ahora la Universidad ya puede recibir las ayudas y subvenciones del Concello", valoró el regidor, quien sin embargo dejó constancia de que el asunto ya "se podía haber arreglado con el anterior rector", en referencia a Salustiano Mato. En Pontevedra y Ourense la Universidad está exenta del pago del tributo.

En los próximos presupuestos de la ciudad el ejecutivo había consignado "más de 360.000 euros" para financiar los gastos de los estudiantes en libros o becas de comedor y en su propia formación, a través de becas. Hasta ahora no era posible liberar esos fondos, dado que la Universidad era deudora, precisó Caballero.

Universidad y Concello ya acordaron en diciembre de 2018 revertir una parte de la cantidad anual que la institución debe abonar por el Impuesto de Bienes Inmuebles -unos 600.000 euros-.

Comedor y deporte

Caballero y Reigosa avanzaban entonces la llegada de "una época nueva" de colaboración y que parte de ese dinero se devolvería en forma de becas de comedor para estudiantes, así como para actividades relacionadas con el deporte.