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El Puerto concluye que la corrosión, la reforma de Abrir Vigo al Mar y el concierto "justifican" el derrumbe de As Avenidas

Defiende que el paseo "tenía reserva para soportar más sobrecarga" sin hundirse -En su pericial apunta que el colapso se produjo en la mayor zona de público

"La acción combinada de una corrosión muy avanzada en las vigas, el peso del recrecido de hormigón no previsto en el proyecto inicial y la aglomeración de público en el concierto". Estos son los factores que, a priori del Puerto, "justifican" el colapso de la estructura del paseo de As Avenidas, el pasado 13 de agosto de 2018, dejando más de 460 heridos y lesionados de diversa consideración.

Más de un año después, la Autoridad Portuaria de Vigo ha emitido su informe pericial de parte cuyas conclusiones coinciden en algunos términos con las planteadas por los ingenieros designados por el Juzgado de Instrucción 3, que sigue la causa por un presunto delito de lesiones por imprudencia.

Coinciden ambos expertos en destacar el "elevado" nivel de corrosión de las vigas y nervios que sostenían la estructura de hormigón que colapsó, además de la que soporta el resto del entarimado de madera que sigue en pié (aunque precintado). Y es precisamente sobre esta observación donde los peritos designados por el Puerto ponen especial énfasis. Señalan los responsables del informe que "no hay diferencias significativas" entre las zonas hundidas y la no hundida, lo que vendía a indicar -a su criterio- que "por si solos" las zonas del paseo no podrían colapsar "unas sí y otras, no". "La corrosión fue un factor necesario, pero no suficiente", certifican.

Por ello, ponen sobre la mesa dos opciones que precipitarían el derrumbe: por un lado, el convenio firmado a tres bandas entre Puerto, Concello de Vigo y Zona Franca y el "sobrepeso" del concierto.

Sobre la primera causa, indican los peritos que se colocó para peatonalizar el paseo un recrecido de hormigón "con la finalidad de mejorar el bombeo de la lluvia". Este añadido de 15 centímetros de grosor supuso "una carga permanente no prevista en el proyecto algo superior a los 365 kg/m2" lo que, a juicio de los expertos, propició el derrumbe: "De no haberse colocado el recrecido de hormigón, no se hubiese producido el colapso incluso con el elevado grado de deterioro por corrosión", afirman tajantes.

Tras esta argumentación, aluden a la segunda causa que, sumada a la corrosión y al añadido de hormigón, devino el derrumbe: el concierto. "Las imágenes muestran una densidad de público realmente elevado en la zona colapsada", argumentan, situación que se habría agravado por el "efecto dinámico" de los miles de asistentes saltando y bailando, lo que "amplificó la carga del peso de las personas y acabó desencadenando el derrumbe".

Señalan también los peritos que sin estas dos causas añadidas, la estructura "tendría aún una cierta reserva para soportar un determinado nivel de sobrecarga sin llegar al colapso como se pone de manifiesto en la parte que no cayó".

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