Un varón de unos 35 años de edad ha fallecido esta tarde tras ser detenido y arrojarse por la ventana de un noveno piso este mediodía en pleno registro de su domicilio, en la avenida de Castrelos, 190. En un primer momento, el varón sobrevivió a la caída, pero horas después murió en el hospital al que fue trasladado, según confirmó la Policía Nacional. Había caído sobre una terraza a la altura de un primero.

El fallecido y su pareja, que vivían con su hija menor de edad, fue denunciado por una mujer latinoamericana que manifestó que viajó desde su país al domicilio como empleada interna y fue retenida y obligada a realizar las tareas del hogar en tanga y camiseta. Un día que salió con la madre de la niña a la calle huyó y unos veinte días después denunció.

El registro domiciliario fue llevado a cabo este mediodía en presencia de la Letrada de la Administración de Justicia y dos abogados de la defensa, pues la mujer del hombre herido figura también como investigada. El arrestado, según fuentes policiales, sorpresivamente se abalanzó sobre una ventana de la vivienda que estaba abierta, precipitándose al vacío.

Tras impactar contra el suelo, quedó en estado muy grave y fue llevado de urgencia a un centro hospitalario. El registro era llevado a cabo con la autorización del juzgado de guardia y estaba motivado por las investigaciones policiales llevadas a cabo a raíz de una denuncia presentada por una mujer que, según cual manifestó en su denuncia, había sido retenida a la fuerza en el domicilio. El motivo de la detención de esta persona era por tanto la comisión de delitos contra la libertad sexual, detención ilegal y revelación de secretos.