La Guardia Civil celebró ayer su día grande, el de su patrona la Virgen del Pilar, coincidiendo con una efeméride especial para este cuerpo, su 175 aniversario. Siete agentes fueron condecorados por sus méritos en el acto que tuvo lugar en el cuartel de Vigo y este año se dio la circunstancia de que cuatro de ellos pertenecen a una misma unidad, la Compañía Fiscal y de Fronteras de la ciudad olívica, que hace una labor clave en puerto y aeropuerto. Unas distinciones a las trayectorias de guardias civiles de un grupo que sigue inmerso en importantes retos. Uno de ellos, el de poner en marcha en Vigo -con ámbito en el espacio aéreo de toda la provincia de Pontevedra- un equipo especializado en el control de drones y de otras aeronaves.
El equipo Pegaso, como se denomina a estos "policías del aire", ya funciona por ejemplo en Madrid desde 2018. También está en marcha en otras ciudades españolas como Córdoba. Y ahora la experiencia también se quiere implantar en Vigo, donde tres agentes ya recibieron formación para esta especialidad de gestión aeronáutica y seguridad operacional. Con el equipo humano preparado, el grupo podrá echar a andar una vez se le dote de los medios técnicos necesarios.
La proliferación de drones, aeronaves pilotadas por control remoto, motiva la creación de estos equipos, una de cuyas funciones es controlar que los aparatos cumplen la normativa, tengan la preceptiva autorización y no causen riesgo en el espacio aéreo. Vigo, al tener aeropuerto, es zona sensible y de hecho ya hubo incidentes, como cuando hace un año un dron puso en peligro en Peinador a un helicóptero de la Policía Nacional.
Pero la labor del equipo que se proyecta para la ciudad va más allá, como controlar que los drones no se usen con fines delictivos, como, explican, invadir la esfera privada de las personas o que sean un medio para transportar droga. Junto a drones, esta patrulla del aire hará labores de control de cualquier otro tipo de aeronaves, desde globos hasta helicópteros.
Distinciones
José Benito Fernández, jefe de la Compañía Fiscal y de Fronteras, fue uno de los condecorados con la cruz de la orden del mérito de la Guardia Civil con distintivo blanco. José Álvarez, Santiago Davila y Santiago Bolívar fueron los otros tres agentes de la unidad distinguidos. Otro proyecto del grupo, que arranca en unos días en Peinador y también a corto plazo en el puerto, es el proyecto PRAT (Patrones de Reacción ante Ataques Terroristas), que implica no solo a guardias civiles, sino también a seguridad privada y personal civil de instalaciones aeroportuarias y portuarias. A través de la formación el fin, dicen, es conocer las "pautas de actuación" ante una hipotética amenaza terrorista.
Los otros agentes condecorados ayer fueron José M. Pérez, del Seprona; José García Cordero, del grupo cinológico y al que le impuso la cruz su hijo también guardia civil; y Rubén S. Sotelo, de Seguridad Ciudadana.
El comandante jefe de Vigo, Óscar Grañas, destacó en su intervención que junto a valores que siempre les caracterizaron de "vocación", "honor" o "servicio al ciudadano", la institución se "moderniza" para enfrentarse a retos como crimen organizado, "ciberdelitos" o terrorismo.
