La Policía Nacional interceptó a un varón pocos minutos después de que éste le hubiera sustraído el teléfono a una funcionaria de los juzgados, tras acudir a una vista, como autor de otro robo. La sala acordó suspenderle la pena de prisión de 2 años a condición de que no volviese a delinquir, si bien su compromiso duró poco más de unos minutos. El condenado, tras acceder a la oficina de la trabajadora para firmar el acuerdo, se habría hecho con el móvil y huyó en bicicleta.

Estas diligencias se tramitarán como un delito leve de hurto. Una vez se celebre la vista por este hecho, y en caso de sentencia condenatoria, el juzgado que lo condenó a los 2 años de cárcel -y acordó a su vez la suspensión de la misma- decidirá si revoca esta condición y dictamina su cumplimiento efectivo.