Las demandas por transporte aéreo y de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) a los negocios locales suponen ya dos de cada tres asuntos ingresados en lo que va de año por el Juzgado de lo Mercantil en Vigo, que se ve superado por este tipo de pleitos, según reconocen fuentes judiciales.
En lo que va de año se han ingresado un total de 430 asuntos, y la mayoría corresponde a juicios ordinarios y de cuantía por retrasos en vuelos y las reclamaciones de la SGAE. Las ejecuciones en ambos casos conllevan numerosas diligencias que complican su tramitación. En la mayoría de los casos se fijan juicios verbales que al final no llegan a celebrarse por el acuerdo entre las partes un par de días antes, lo que también conlleva un trastorno importante de agenda con la ocupación de las salas de vistas.
Las cuatro demandas que entraron ayer eran sobre retrasos en vuelos. El juzgado no solo acoge los asuntos de los vecinos de Vigo y su aérea, sino de todos aquellos viajeros afectados con punto de origen o de destino en aeropuerto o puerto de la ciudad, residan donde residan.
En lo que va de año la sala de lo Mercantil ha registrado 430 asuntos, en su gran mayoría sobre transporte sobre la propiedad intelectual.
En el caso de los vuelos la reclamación más habitual va de los 250 euros a los 400 y, además de las plataformas online que se dedican a su tramitación, en los dos últimos años se ha incrementado el número de particulares que demandan directamente y cubren a mano los formularios oficiales que se descargan del BOE en Internet. Entre las reclamaciones, cada vez tienen mayor peso las de ciudadanos extranjeros con problemas en los vuelos con origen y destino en Sudamérica. En el caso de RENFE no hay demandas judiciales, porque la propia compañía ferroviaria soluciona los retrasos en los viajes con la devolución del importe el billete.
En cuanto a las demandas de la SGAE, bares, comisiones de fiestas, pubs o gimnasios forman parte de los demandados habituales.
Esta situación de saturación no es exclusiva del Mercantil de Vigo, sino de la mayoría de estas salas especializadas, que nacieron dentro del orden civil para los procesos concursales y la resolución de conflictos sobre las materias mercantiles. De ahí que algunos expertos aboguen por la creación de algún tipo de arbitraje que agilice la tramitación de las demandas de transporte.
