El director de la planta con la que cuenta el Grupo PSA Peugeot Citroën en Vigo, Ignacio Bueno, ha avanzado la realización de nuevas contrataciones, que se sumarán a las más de 1.200 de este año, y ha indicado que la fábrica espera alcanzar su máximo rendimiento en 2020, con una producción superior a los 500.000 vehículos.

Durante su intervención en la tribuna 'Las nuevas formas de movilidad y la fábrica del futuro', celebrada este viernes en Vigo, Ignacio Bueno también ha detallado que, mediante el aumento de la producción, la planta prevé generar un impacto de más de 1.100 millones de euros en el sector de la automoción, así como más de 4.000 empleos.

Además, como principales retos, ha insistido en la mejora de la "eficiencia" de la fábrica, para lo ha abogado por una apuesta por la innovación y la "contención de gastos", de los que, según ha apuntado, el personal representa el 50 por ciento. Ha insistido en que resulta conveniente reducir los costes derivados de la producción para mejorar la competitividad de la empresa, que, según ha apuntado, aspira a mejorar los resultados de las distintas plantas con las que cuenta el grupo en la península ibérica.

Adicionalmente, ha advertido de la competencia que representan países como Marruecos debido al bajo precio de sus productos.

En ese sentido, el director de la fábrica viguesa ha hecho hincapié en la importancia potenciar la "flexibilidad" de la empresa con el objetivo de adaptarse a las demandas del mercado. También ha resaltado la necesidad de que los proveedores trabajen en esa misma línea.

De cara al futuro, ha avanzado el incremento de la demanda de trabajadores con capacidad para gestionar zonas automatizadas y ha abogado por convertir los espacios de trabajo en lugares más atractivos.

"Incertidumbre"

"Incertidumbre"Mientras, ha lamentado la "incertidumbre" generada en relación a las sanciones estipuladas en el marco de la Corporate Average Fuel Economy (CAFE), que, según ha asegurado, puede afectar a la demanda de vehículos por parte de particulares y, en consecuencia, al empleo. Además, ha apuntado que la planta de PSA cumplirá con la normativa de emisiones de CO2 para evitar estos costes adicionales, así como debido a su compromiso medioambiental.

Ante esta situación, ha recordado que el grupo automovilístico llevará a cabo una estrategia de electrificación e hibridación hasta 2025 y ha reivindicado la necesidad de incrementar las ventas de vehículos eléctricos para compensar los niveles de emisión de los térmicos. No obstante, ha resaltado que estos solo supondrán el 9 por ciento de la producción total.

"Inestabilidad política"

"Inestabilidad política"Además, ha lamentado que, a la inseguridad generada por las nuevas normativas de emisiones, se sume la derivada de la "inestabilidad política" -en alusión a la repetición de las elecciones generales que tendrá lugar en noviembre-.

A ese respecto, el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, ha hecho un llamamiento al "entendimiento" entre las distintas fuerzas políticas, que, en su opinión, resulta necesario para garantizar el desarrollo de la industria.

Sobre ese punto, Conde ha apuntado a la sostenibilidad como uno de los principales retos del sector y ha puesto en valor el trabajo realizado por la planta viguesa de PSA de cara a una transición energética. Además, ha abogado por continuar un modelo de acción, que según ha apuntado, garantiza "soluciones innovadoras y sostenibles".

Además, ha apostado por que la Xunta y la fábrica continúen trabajando en conjunto en ese sentido, una propuesta que Ignacio Bueno ha secundado.