Seis meses de prisión, mismo tiempo de inhabilitación y multa. Es la pena que aceptó ayer en el Juzgado de lo Penal 2 de Vigo un inspector de buque de un buque arrastrero por el accidente laboral que sufrió un operario -de una empresa subcontratada para trabajos de mantenimiento- al resbalar y caer desde la escotilla a la bodega del barco. El trabajador sufrió lesiones en un tobillo y en una mano.

El fiscal dice que la barandilla de cuerdas sujeta por puntales instalada para eliminar el riesgo de caída en las obras que se hacían era "inadecuada" por no tener resistencia suficiente. La sentencia es por delito contra los derechos de los trabajadores y lesiones imprudentes.