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El Concello revisa 3.100 pinos al adelantarse el ciclo de la procesionaria

En los ejemplares de O Castro se trabaja reparando los 128 collares que protegen sus troncos de las oruga

// FdV

Desde el año 2013, el Concello lleva haciendo frente a un invitado no deseado que amenaza con no solo con dañar los pinares de la ciudad, sino que puede causar irritaciones y urticaria en la piel y afectar también a las mascotas. Las plagas de procesionaria están bajo control, y de forma periódica se aplica los tratamientos preventivos que evitan su proliferación, pero este año el ciclo natural de esta oruga se ha adelantado tres meses por la ausencia de lluvias obligando a extremar las precauciones y, al empezar a darse una situación climatológica favorable para que se incrementen las poblaciones, el Concello realiza un seguimiento exhaustivo en múltiples zonas de la ciudad sensibles como parques forestales y zonas ajardinadas recreativas y de ocio.

Concretamente, son un total de 3.103 ejemplares los que se someterán a esta observación, seguimiento y tratamiento en Castrelos (2), Coia (6), A Guía (51), Samil (2.000), Riouxa (5), Centro Cívico de Teis (9) y en los parques forestales de A Madroa (65), Monte dos Pozos (500), Saiáns (50), San Andrés (150), San Miguel (100), Vixiador (70) y Zamáns (100). En O Castro estas labores de control ya están en marcha. A lo largo de esta semana, operarios municipales repararon y optimizaron los collares isabelinos -anillos de poliuretano que rodean los troncos de los pinos- de los 128 árboles para su puesta a punto para recoger las orugas que bajen por la corteza.

Además de esta técnica de control de la procesionaria, la entidad responsable de la misma, retiró de forma manual este año 223 bolsones con diferentes plataformas. A comienzos de verano se instalaron 62 trampas de feromonas, es decir, se capturan exclusivamente los machos de esta especie con el fin de reducir los apareamientos, por lo que las hembras no copuladas tendrán huevos inviables de modo que se reduce la población de la plaga.

Para esta segunda quincena de septiembre se aplicará en los pinos un insecticida sistémico y específico, que afectará solo a este insecto respetando así al resto de fauna, al estimar que la eclosión de los huevos de la procesionaria estará en su máximo apogeo en la segunda quincena de octubre o noviembre. De igual modo se colocarán cajas nido, en torno a 10 unidades para fomentar la cría de aves insectívoras que se alimentan de orugas jóvenes de esta especie.

También a lo largo del verano, y cada dos días, se revisaron todos los pinos de O Castro aplicándoles insecticida fitosanitario al interior de los collares.

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