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Un nuevo retraso aplaza hasta diciembre el fin de las obras de la Tesorería

El proyecto se encuentra al 89% de ejecución - Acogerá a 210 trabajadores

Futura sede de la Seguridad Social, a la izquierda, y la fachada con el letrero de La Metalúrgica. // FdV

La construcción de la nueva se de la Dirección Provincial de la Seguridad Social en Vigo es una de esas obras que coleccionan fechas de remate, sin que ninguna acabe por traducirse en realidad. Para remontarse a la primera hace falta recuperar muchas hojas del calendario: fue en 2010 cuando se estimó que la sede ubicada en García Barbón 70-72 -en los terrenos de la emblemática factoría de La Metalúrgica- iba a estrenarse para concentrar allí la mayoría de los servicios de la administración dispersos por la ciudad. Desde entonces el camino ha estado sembrado de obstáculos: una crisis que obligó a arrumbar en un cajón el proyecto, licencias municipales a punto de caducar y convenientemente prorrogadas, recursos de empresas y ejecuciones al ralentí han postergado para finales de la década la inauguración del edificio. Ahora, según fuentes del Ministerio de Trabajo, habrá que aplazar la ejecución de las obras dos meses mas. Lo que en un principio estaba previsto para octubre, tendrá que esperar al 3 de diciembre.

Las mismas fuentes del departamento de Magdalena Valerio apuntan a que las obras "avanzan a buen ritmo". El grado de ejecución del inmueble, compuesto por dos bloques separados en cuyo frente se mantiene la fachada de la empresa de estampaciones de hojalata, se encuentra al 89,94%. "La única novedad -matizan en Trabajo- es que debido a incidencias surgidas en el suministro de algunos materiales, se está tramitando una ampliación del plazo de ejecución de dos meses que ha sido informado favorablemente por la Oficina Técnica de la Tesorería".

Si se cumple el calendario, cuando se concluyan los trabajos habrán pasado 14 años desde el anuncio inicial de la sede. En 2005 ya trascendió que la Seguridad Social había comprado por once millones a la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos de la Seguridad del Estado (GIESE). Hasta aquel momento allí se mantenían las cocheras de la Policía, y antes, los bomberos.

En 2015, cuatro años después de obtener licencia de derribo de la nave (dos plantas y anexos en 2.800 m²) cuando la crisis empezó a ser vista ya por el retrovisor, el Gobierno volvió a anunciar la licitación del proyecto por un presupuesto de 20 millones. La medida del éxito del concurso -y de una época aciaga para la construcción- la dieron las 70 empresas que se ofertaron para ejecutar la obra, con rebajas de hasta el 50% sobre la estimación inicial de coste. Al final, el Gobierno de Rajoy adjudicó la sede por 12 millones de euros a la UTE integrada por Proyecon y Joenfe, dos firmas ourensanas, que para entonces manejaban un plazo de ejecución de 36 meses.

La primera piedra se colocó en 2016, pero al acto le siguió la lentitud con que se desarrollaba la construcción -pasados nueve meses apenas se había ejecutado un 4%-.

Según las previsiones iniciales, la sede de la Tesorería ocupará una superficie de 13.000 m² donde antes se erigía la factoría encargada por el ingeniero José Barreras Massó, ampliada en 1917 por Jenaro de la Fuente y en 1938 por Francisco Castro.

La previsión que baraja el Ministerio es que en el edificio pasen a trabajar 210 empleados que forman parte de las plantillas de la Dirección Provincial, dos administraciones. dos Unidades de Recaudación Ejecutiva de la Seguridad Social (URES), más los empleados de la Intervención Delegada Territorial. el Servicio de Prevención Mancomunado, el Servicio Jurídico y un Centro de Información (CAISS).

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