Los turistas abarrotaban ayer por la tarde la zona del Náutico. Muchos paseaban por As Avenidas. Algunos de ellos visitaban Vigo por primera vez desde el verano pasado y en sus rostros se reflejaba incredulidad cuando constataban que en doce meses no se había arreglado el enorme socavón provocado tras la caída del muelle el año pasado durante O Marisquiño. "Estaba en el festival cuando pasó aquella desgracia. Más allá de eso, me enamoré de Vigo y de su entorno y decidí volver este año a pasar aquí mis vacaciones. No doy crédito al mirar el paseo en el mismo estado que cuando se cayó. ¿Cómo es posible que no lo hayan arreglado después de tanto tiempo?", se pregunta Bruno, un turista madrileño.

Como él hay muchos casos. Personas que no habían vuelto a Vigo desde el verano pasado y que pensaban que el paseo de As Avenidas estaría ya más que reformado. La colocación de una red azul anticaídas para tapar el socavón no evita que los paseantes se fijen en él. Muchos incluso se hacen selfies desde la distancia, tras las vallas, y los suben a las redes sociales para que sus amigos comprueben que el paseo sigue sin arreglarse un año después.

También hay turistas extranjeros que no conocían el mal estado de As Avenidas y que se sorprenden al comprobar que una parte continúa vallada. "Nos encanta Vigo y volveremos. ¿Pero qué ha pasado aquí? No nos esperábamos ver esto en una zona tan bonita y al lado del mar como esta", asegura Ashley, una visitante inglesa que está pasando el verano en la ciudad olívica con su familia.

De lo que no hay dudas es que todas las personas que caminan por el Náutico se detienen al ver la parte dañada del paseo de madera. Sigue llamando la atención pese a que está tapada. Tal y como afirmaba una comerciante, "hay días que esto se parece a la zona cero de las Torres Gemelas".