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Urbanismo aprueba un bloque de 13 viviendas en Balaídos

La promotora invertirá un millón de euros. Dispondrá de 15 plazas de aparcamiento

Infografía del proyecto que se construirá en Balaídos // FDV

El mercado inmobiliario del entorno de Balaídos se verá fortalecido en breve con uno de los elementos que -insisten los promotores de la provincia- más escasea en Vigo: vivienda a estrenar. La Gerencia de Urbanismo acaba de dar luz verde a una licencia de derribo y obra para levantar un bloque con 13 viviendas y 15 plazas de aparcamiento en el número 43 de Avenida de Balaídos. La promotora invertirá algo más de un millón de euros -1,02 millones- en levantar la edificación, que alcanzará una superficie construida total de casi 2.500 metros cuadrados (m2).

El proyecto está redactado por los arquitectos Antonio Davila Alonso, Marcelino César Jiménez López y Luis Daniel Meijide Rico. El inmueble constará de dos plantas soterradas que se destinarán a garaje -con seis plazas por altura-, una planta semisótano con capacidad para tres plazas, una docena de trasteros, planta baja para portal, una vivienda, traslero y local de uso tercio y cinco plantas altas con dos viviendas cada una. En el bajocubierta dispondrá también de dos residencias, lo que sumará en total 13 viviendas y 15 plazas para el estacionamiento de vehículos.

Antes de levantar el nuevo bloque residencial, la promotora deberá derribar el inmueble existente, que se compone de sótano, una planta baja y cinco en altura y que suma, en total, algo menos de 500 m2. La parcela está situada cerca del río Lagares y entre el parque de Castrelos y el estadio de Balaídos, que queda a aproximadamente 400 metros.

Espedrigada SCGV señala que el bloque de viviendas dispondrá de zona verde "comunitaria y privatiza", si bien su uso estará restringido y será accesible solo para quienes residan en el inmueble. Las viviendas dispondrán de tres dormitorio de más de 90 m2, salvo el ático y uno de sus pisos.

Debido a la crisis del ladrillo y a la anulación del PXOM de 2008, lo que hizo que el urbanismo de Vigo se viese obligado a recurrir al plan previo, de 1993, la ciudad registra un déficit de vivienda nueva, a estrenar. En 2018 los promotores inmobiliarios cifraban el stock en venta en apenas 80 residencias.

En parte para atajar esa situación el Concello acaba de dar luz verde a la ordenación provisional, una herramienta que ha permitido desbloquear 50.000 parcelas distribuidas por la ciudad. Prueba del nivel de demanda es que poco después de que el pleno validase el instrumento, Grupo Viqueira presentó en la Gerencia de Urbanismo un proyecto para 20 viviendas en Emilia Pardo Bazán.

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