El debate sobre la seguridad de las atracciones de feria en las verbenas de Galicia vuelve a la actualidad después de que la Policía Local de Vigo precintase la pasaba madrugada -la noche en la que miles de vigueses acudían a ver los fuegos de luces- la noria que hasta ahora ocupaba parte del recinto de la fiestas de Bouzas.

Lo hacía después de detectar un "funcionamiento anómalo" en la atracción de feria y tras recibir una llamada en la que se advertía del desplazamiento de una de las cabinas de la noria que, según parece, se habría movido cuando una niña de 7 años bajaba del habitáculo.

Ya en el lugar de los hechos, la policía pudo escuchar las quejas de varias personas que habrían presenciado el incidente y la versión del responsable de la noria de Bouzas. D. S. H, un jienense de 39 años de edad que explicó a la Policía Local que la situación se habría producido por una descompensación del peso de los usuarios.

Aunque la noria de Bouzas contaba con los permisos y la documentación en regla -tanto con el seguro de responsabilidad civil como el certificado de solidez de montajes- la Policía Local de Vigo, apoyados en la opinión de los Bomberos de Vigo desplazados hasta el lugar, instó al responsable a que cesase la actividad para garantizar la seguridad de los usuarios, a lo que accedió sin presentar oposición.

De hecho, el titular de la noria de Bouzas explicó a los agentes que a primera hora de la mañana procedería al desmontaje de la atracción, pues se desplazaba a Santiago de Compostela para instalarla y tenerla lista para las fiestas del Apóstol de la capital gallega. Tuvo que esperar, sin embargo, a que los técnicos municipales revisasen la instalación y se emitiese un informe explicativo de las causas de esta anomalía en su funcionamiento.