El incendio registrado en la terminal Ro-Ro de Bouzas durante la noche del pasado viernes ha dejado un considerable balance de daños en el parque de vehículos estacionado. El número de coches calcinados asciende a 16, pero hasta cuarenta habrían sufrido daños que impiden su comercialización, según fuentes de la Autoridad Portuaria, la propietaria de los terrenos. Las primeras estimaciones del organismo apuntan a que las pérdidas podrían situarse en el entorno del millón y medio de euros.
El fuego se inició alrededor de las 22.00 de la noche, mientras tenían lugar las populares fiestas del barrio de Bouzas. En concreto, las llamas se registraron en la parcela D situada en el área oeste de la terminal Ro-Ro, un espacio cedido a la Autoridad Portuaria por Zona Franca. El incidente, que despertó la atención de los asistentes a la fiesta y de buena parte de los vecinos de Vigo, fue sofocado por los Bomberos, que se emplearon en la zona durante aproximadamente de una hora. La Policía Nacional y la Guardia Civil también movilizaron varias patrullas.
Por el momento, se desconocen oficialmente las causas que originaron el incendio, aunque una de las principales hipótesis apunta a los fuegos pirotécnicos que en aquel momento se estaban lanzando, con ocasión de los festejos populares. La Autoridad Portuaria sostiene que una cantidad "considerable" de varillas de las bombas fueron recogidas en el interior de la terminal.
La institución portuaria y la Cofradía del Cristo de los Afligidos de Bouzas, los organizadores de la fiesta, difieren en cuanto a la existencia de permisos para la realización de la tirada de la pasada noche, dos días antes del espectáculo pirotécnico principal que tendrá lugar el próximo domingo.
