Lauryn Hill vendió 19 millones de ejemplares con su disco The Miseducation Of Lauryn Hill, y batió records en los Grammy al convertirse en la primera mujer con mayor número de nominaciones, nada menos que diez y mayor número de galardones, ganando cinco de esas nominaciones.

Pero además de por todos sus éxitos, la cantante también es conocida por sus escándalos y, sobre todo, por sus retrasos. En diversas ocasiones, incluido en el Mad Cool celebrado en Madrid hace poco, los DJ's tuvieron que alargar su actuación para poder amenizar la espera de la estrella. Una fan que fue a verla a Oxford declaró, "salió una hora y media tarde y solo cantó 30 minutos". En esta ocasión el encargado de ser su telonero es el alcalde Abel Caballero, que esperemos tenga preparado su discurso en versión extendida en caso de ser necesario.

En el auditorio de Castrelos debería tocar a las 22:30 horas cuando está programado su concierto, ¿llegará a tiempo? Habrá que acercarse para comprobarlo.

Aunque intentó por todos los medios no convertirse en una "superestrella" al uso, con exigencias y extravagancias varias, como Jennifer López que exige que todo su camerino sea blanco, hay que decir que no lo consiguió. Una de sus exigencias para actuar es que no la miren a los ojos.Su pequeño encuentro con la justicia

En el año 2013 la cantante ingresó en la prisión de mínima seguridad de Danbury (Connecticut) al no pagar sus impuestos, en total debía a hacienda 1,8 millones de euros, deuda que saldó y por la que cumplió tres meses de cárcel, tres de arresto domiciliario y 1 año de libertad condicional, además de pagar una multa de 60.000 dólares, que se suma al pago que ya había abonado.Culto religioso

Otro año que marcó a Lauryn fue el 2000, cuando comenzó a asistir a sesiones de estudio de la Biblia con un gurú que se hacía llamar Brother Anthony. "Esas clases eran una mierda enfermiza" declaraba su compañero de The Fugees Pras Michael. En aquellas clases le daban consejos como "renuncia a todo tu dinero", Lauryn llegó a despedir a todos sus managers porque tal y como encomendaban en la secta "no le debía nada a nadie, ni a sus fans".

Sus pequeños problemas también afectaron a su trabajo con diversas bandas, en el año 2001 tuvo que pagar cinco millones de dólares a New Ark, con los que participó en su disco The Miseducation Of Lauryn Hill, la banda la inculpó al no incluirles en los créditos del disco y atribuirse ella todo el mérito, solamente aparecían como "apoyo adicional". Aunque en un principio no quiso aceptar, su sello discográfico la convenció.

A pesar de todo, la cantante sigue llenando escenarios y sus entradas para el concierto de Castrelos se agotaron en el mismo día.