Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Enfermeras eventuales del área rechazan el nuevo contrato de continuidad del Sergas

-Alegan que fomenta la precariedad y tendrían jornadas ininterrumpidas de 31 horas - Estudian la posibilidad de presentar una demanda conjunta contra la consellería

Enfermeras tanto de Atención Primaria como Hospitalaria rechazan el contrato. // FdV

El pasado jueves, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunciaba que el Servicio Galego de Saúde (Sergas) extenderá el nuevo contrato de continuidad, que hace meses que ya se ofrece a los médicos de familia, al personal de enfermería eventual. Dicho contrato podría tener una duración de hasta tres años y busca, según la Xunta, garantizar una mayor estabilidad a los trabajadores, reducir la temporalidad y el número de contratos sucesivos y garantizar la estabilidad laboral.

Sin embargo, según ha podido saber este periódico, un porcentaje muy alto de enfermeras tanto de atención primaria como hospitalaria que están en las listas del Sergas (es decir, las que no tienen plaza fija), rechaza rotundamente ese nuevo contrato. El motivo, alegan, es que fomenta la precariedad hasta el punto de que, en caso de necesidad, les podrían obligar a trabajar 31 horas de forma ininterrumpida. Es decir, de las 48 horas a la semana trabajarían, más de la mitad lo harían de forma continuada y sin descanso.

No solo eso. Otro de los puntos conflictivos es el hecho de que solo el 60% de la jornada laboral estarían de forma fija en el centro sanitario correspondiente. El resto de horas se dedican a guardias, pero quienes se adhieran al nuevo contrato no sabrán hasta última hora dónde tendrán que ejercer esas guardias. Es decir, que por la mañana podrían estar trabajando en el centro de salud de Redondela y, por la tarde, recibir una llamada para hacer una guardia en el Cunqueiro.

"O sea, nos obligarían a estar disponibles las 24 horas y estar siempre pendientes del teléfono. Los últimos datos estadísticos demuestran el gran problema de la baja natalidad en Galicia, el señor Feijóo anunció medidas para paliar este problema. ¿Pero cómo se puede compatibilizar este tipo de contratos con la conciliación familiar?", se pregunta Lorena Benavides, exenfermera del centro de salud de Pintor Colmeiro y que ahora está en situación de suspensión de llamamientos para poder cuidar de sus hijos ante la imposibilidad de conciliar su trabajo con su vida personal. En su caso están otras 963 enfermeros y enfermeras del área sanitaria de Vigo que están en las listas del Sergas y que también han solicitado la suspensión de llamamientos por condiciones familiares o porque han recibido mejores ofertas de trabajo en otras comunidades autónomas o en el extranjero. "Yo tengo que cuidar de un hijo pequeño y tengo a una persona mayor a mi cargo. Con las exigencias abusivas del Sergas, me es imposible compatibilizar el trabajo con mis responsabilidades familiares", denuncia otra enfermera de Vigo, que prefiere no revelar públicamente su nombre.

Varias de estas trabajadoras sanitarias se están reuniendo estos días con varios abogados para estudiar la posibilidad de presentar una demanda conjunta ante el Sergas que tumbe el nuevo contrato y que obligue a la Xunta o bien a modificar parte de las condiciones contractuales que propone o bien buscar una alternativa.

Según fuentes sanitarias, en la actualidad hay en Galicia más de 1.561 profesionales de la enfermería que llevan más de once años trabajando con contratos eventuales. "De esta forma es imposible poder planificar un futuro laboral porque dependemos de una administración que no valora nuestras cualidades técnicas, convirtiéndolas en comodines para cualquier puesto de trabajo (quirófano, urgencias, centros de salud...). Lo único que pedimos son unas condiciones laborales dignas", afirma Lorena Benavides.

El personal de enfermería no es el único que rechaza con contundencia el nuevo contrato de continuidad que le ofrece el Sergas. Tal y como adelantó FARO a inicios de año, la mayoría de los médicos de familia residentes del área sanitaria de Vigo también comunicaron al Sergas que no firmarían la nueva propuesta contractual.

Compartir el artículo

stats