Vigo va a contracorriente. Mientras la tendencia en el conjunto de España es perder población, la ciudad olívica lleva tres años consecutivos creciendo. Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) que hizo ayer públicos el alcalde, Abel Caballero, reflejan que en 2019 viven en Vigo 295.323 personas, casi 3.000 más que en 2016. "La ciudad está recuperando población y nos encaminamos de nuevo hacia los 300.000 habitantes", afirmó el regidor olívico.

La tendencia negativa que Vigo sufría desde 2012 se frenó hace tres años. Entre 2012 y 2016 la ciudad perdió cuatro millones y medio de censados. Un decrecimiento preocupante que parece que ya ha quedado definitivamente atrás. Ahora el censo municipal se acerca a cifras de principios de esta década. En 2012 se registraba el mejor dato de los últimos diez años, con 297.355 personas en el padrón municipal de Vigo. La ciudad espera mantener ese crecimiento demográfico de los últimos cuatro años y repetir el alza imparable vivida entre 1996 y 2005. Durante todos esos años, Vigo no dejó de ganar habitantes.

La ciudad ostenta un curioso honor en la geografía española: es, de lejos, la urbe que acoge un mayor número de vecinos que su capital de provincia. Los datos publicados por el INE en enero muestran que a comienzos de 2018 había empadronados en la ciudad 293.642 habitantes frente a los 82.802 de Pontevedra. Entre ambas urbes habría así un amplio margen de más de 210.800 personas. Solo un año antes esa distancia era algo menor. A lo largo de 2017 tanto la urbe del Lérez como la olívica ganaron población en una medida muy similar -0,15% la primera y 0,22% la segunda-, pero esa evolución sirvió a Vigo para ensanchar todavía más su distancia con la capital de provincia. En enero de 2018 Vigo multiplicaba por 3,5 el padrón de Pontevedra.

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Por otro lado, la Junta de Gobierno Local adjudicó ayer la contratación del arrendamiento de un sistema de climatización para el pabellón central pabellón de Traviesas de cara al campeonato mundial júnior de balonmano. También se aprobó la adjudicación del suministro de un videomarcador electrónico para el pabellón central de Traviesas por 57.352 euros.