El Juzgado Penal 1 de Vigo suspendió ayer el juicio por un siniestro laboral mortal ocurrido en abril de 2016 en las obras de cimentación de un edificio en construcción en la avenida de Castrelos. La Fiscalía acusa a dos personas de delito contra los derechos de los trabajadores y homicidio por imprudencia grave, solicitando dos años, seis meses y tres días de prisión. También demanda 400.000 euros de indemnización. El accidente ocurrió al venírsele encima a la víctima una carga de varias toneladas de acero. El fiscal estima que se empleó material inadecuado para elevar la carga y que hubo "improvisación" en la forma de descargar.