La nueva corporación municipal de Vigo debuta envuelta en controversia después de que BNG y Marea de Vigo hayan exigido constituirse como grupos propios mientras que el gobierno local se aferra al reglamento del pleno para enviarlos al grupo mixto.

El concejal del BNG Xabier Igrexas señaló ayer que las elecciones del 26M configuraron un pleno "más plural", y si así lo quisieron los vigueses, el pleno tiene que reflejarlo "con más voces, nunca con menos". De hecho, Igrexas ha anunciado la constitución del BNG como grupo propio con él como único miembro y portavoz tras afirmar que el reglamento municipal, al que se aferra el PSOE para enviar a ambas formaciones al grupo mixto, es contraria a derecho.

El portavoz del grupo socialista, Carlos Font, ha replicado afirmando que el reglamento del pleno de Vigo fue aprobado hace tres años sin que nadie lo recurriera y "dentro de la legalidad absoluta". Ese reglamento, que marca un mínimo de tres concejales para constituir grupo propio en el Ayuntamiento de Vigo, casa con la ley reguladora de bases del régimen local, "que es una norma del Estado español", ha recalcado Font.

"No se trata de un problema reglamentario, sino de un problema político y democrático", ha contestado a su vez Igrexas. "La decisión de emparedar a tres ediles de dos candidaturas diferencias, como fueron Marea y BNG, en un grupo mixto conculcaría los derechos que como representantes electos nos corresponde", ha añadido. Igrexas asegura que "los 8.500 vigueses que votaron al BNG escogieron un concejal, no un tercio de concejal", que es lo que él sería en el grupo mixto al no disponer de tiempo para intervenir en el pleno.