Luz verde a los cambios en el proyecto de reforma del antiguo hospital Xeral para reconvertirlo en Ciudad de la Justicia. La Gerencia de Urbanismo acaba de aprobar la última revisión planteada por los técnicos, que contempla reconstruir la cimentación y estructura de las alas en forma de "H" situadas en la base y ampliar los dos sótanos y la planta de acceso. Con los cambios, se añadirán algo más de 5.500 metros cuadrados (m2) a la infraestructura. El presupuesto de ejecución se encarecerá en 7,74 millones de euros. En marzo, tras conocerse que el deterioro de la estructura obligaría a derribar y reconstruir los laterales de la torre, desde la Xunta ya se anotaba que el sobrecoste de las obras rondaría los 10 millones de euros.
Los cambios que la Xunta acaba de noticiar a Urbanismo, organismo que los ha tramitado en un tiempo récord -el proyecto de ejecución modificado llegó a la Gerencia la penúltima semana de mayo- contempla cuatro actuaciones. Los técnicos proponen crear una nueva cimentación y estructura de las alas en forma de "H". En el segundo sótano, que se destinará a garaje y archivo, se ganarán 1.637 m2 con el fin de ampliar el vaciado de la parcela hasta el linde suroeste. La razón es la presencia de un aljibe y una sala de bombas que actúan como elementos de contención de tierras y de las edificaciones vecinas. Los técnicos proyectan además un sistema de muros que sirva de refuerzo.
La planta inmediatamente superior (la P-01), que se usará también como garaje y acogerá usos administrativos y una guardería, ganará 2.203 m2. En la planta cero, en la que se ubicará el acceso principal y dependencias para la policía, el Imelga, juzgados y sala de visitas, la superficie construida se ampliará en otros 1.684 m2. El nuevo espacio se prolongará bajo el rasante de la parcela de la zona noroeste. Sumadas, las modificaciones añadirán 5.524 m2 a las instalaciones.
La licencia de Urbanismo especifica que las obras deberán arrancar antes de seis meses y no podrán prolongarse más de tres años. También detalla que los trabajos no permanecerán paralizados durante más de medio año.
Durante una visita a las obras de la futura Ciudad de la Justicia, a principios de marzo, el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, aseguró que las obras finalizarán en agosto de 2020, lo que acarrearía un retraso de seis meses. La razón de esa demora es el deterioro de la estructura de los laterales del Pirulí, lo que obliga a derribarlos y reconstruirlos. La zona afectada son ampliaciones ejecutadas durante las décadas de 1970 y 1980. A pesar de ser más recientes, sus estructuras metálicas no presentan la calidad de las levantadas en los 50.
