Povisa ha empezado a utilizar un láser de CO2 de última generación para tratar lesiones premalignas de útero, vagina, perianales y verrugas vaginales, todas ellas lesiones asociadas al virus del papiloma humano. Este sistema, de los más modernos del mundo, hace que las intervenciones puedan hacerse de forma ambulatoria y sin anestesia o con anestesia local.