El pasado 30 de enero, una revisión rutinaria de examen acabó en un cruce de denuncias por un presunta agresión y amenazas entre un profesor de la Facultad de Económicas, su alumna y la madre de ésta. Ambas acudieron al centro para mostrar su desacuerdo con la calificación obtenida en la prueba -un 0,7- y tras una "fuerte discusión" e incluso llegar a encerrar al docente en su despacho, tal y como se recogía en el atestado policial, la alumna presuntamente lo golpeó con un paraguas mientras su progenitora lo sujetaba.

Estos hechos derivaron en la apertura de una causa en el Juzgado de Instrucción 4 de Vigo, al encontrarse en funciones de guardia. Y ya finalizada esa investigación judicial, el magistrado en el auto en el que transforma las diligencias previas en procedimiento abreviado, concluye que existen indicios de delito con respecto a la estudiante y a su madre, a quienes atribuye la presunta autoría de un ilícito de atentado a la autoridad con lesiones, según precisaron fuentes próximas al caso. El próximo paso procesal será dar traslado a las acusaciones para la formulación de sus escritos de calificación.

La sala instructora concluye la investigación tras haber recibido el informe forense relativo a las lesiones que habría sufrido el profesor universitario. Los tres también fueron citados a declarar a principios de abril para conocer su versión de los hechos, en esta ocasión, los tres en calidad de investigados debido al cruce de denuncias entre las partes.

Fuentes próximas al caso afirmaron que la estudiante y su progenitora intentaron llegar a un acuerdo económico con el docente, si bien éste no se produjo, por lo que la causa continuó por el procedimiento habitual.

El delito que la sala atribuye al procedimiento cuenta con una reciente reforma en su tipificación penal. Concretamente fue en el año 2015 cuando, bajo la pretensión de proteger y amparar la situación jurídica de profesores o médicos, se extendió a estos profesionales la calificación de atentado a la autoridad, recogido en el artículo 550.1 del C.P.. La aprobación de esta enmienda aumenta también la condena impuesta, que lleva aparejada una pena de prisión "Los atentados serán castigados con las penas de prisión de uno a cuatro años y multa de tres a seis meses si el atentado fuera contra autoridad y de prisión de seis meses a tres años en los demás casos", tal y como se recoge en el artículo del Código Penal.

Según la información facilitada por efectivos policiales, el profesor supuestamente agredido se encontraba en su despacho con la estudiante y su madre a última hora de la mañana del pasado 30 de enero. Tras discutir con él, ellas le sustrajeron las llaves y lo dejaron encerrado. El docente pudo salir porque disponía de una copia, pero entonces volvió a encontrarse con ambas mujeres, que lo increparon. Según las mismas fuentes, los tres accedieron de nuevo al despacho y la madre sujetó al docente mientras la hija le golpeaba con un paraguas, hiriéndole en la nariz. Las presuntas agresoras ya no se encontraban en la facultad cuando llegó la patrulla de la Policía Local y el profesor manifestó su intención de denunciarlas.

Antecedentes

AntecedentesLas denuncias por episodios violentos en la Universidad son escasas, pero otra profesora del centro interpuso hace unos años una denuncia policial contra un alumno después de que éste la insultase e intentase agredirla tras acudir a su despacho, también para revisar una nota, además de causar destrozos en la estancia. El estudiante fue condenado a 6 meses de cárcel y a indemnizar con 130 y 175 euros, respectivamente, a la Universidad y a la docente. También se le castigó con 4 meses de expulsión.