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Porro apuesta por formar una gestora solo de mujeres y recupera a Teresa Cendón

La exalcaldesa renuncia al CES para presidir el nuevo órgano

Corina Porro y Teresa Cendón en una foto de archivo // Ismael Ferradas

La noticia saltó el pasado lunes, cuando el PP la propuso para resucitar al partido en Vigo. Pero faltaba que el "sí" se hiciera público. Corina Porro confirmó ayer que asumirá la presidencia de la comisión gestora con la meta de reconstruir una formación en horas bajas. Después del batacazo electoral del 26-M que forzó a Elena Muñoz a presentar su dimisión, la alcaldesa entre 2003 y 2007 atiende a la llamada del PP con "ilusión" y "con el propósito de buscar lo mejor para la ciudad y para el partido". "Acepto el resto. Mi amor por Vigo está por encima de todo", declaró.

Por delante la esperan varias tareas. En sus manos estará pilotar la transición que culmine con la convocatoria de un congreso, pero también recomponer a las distintas sensibilidades internas alrededor un proyecto solvente, capaz de mejorar la imagen del PP antes de las elecciones autonómicas clave de 2020. Para ello formará un "núcleo duro" de cinco personas con fuerte presencia femenina, según ha podido conocer FARO. Junto a ella, la acompañarán una secretaria general y tres vocalías.

Ese será el equipo con el que arranque el mandato, sin perjuicio de que el número de miembros del órgano pueda ampliarse en el futuro. En la secretaría general se espera a una mujer de la máxima confianza de la exalcaldesa, con la que ya habría trabajado con anterioridad, mientras que una de las vocalías la ocupará Teresa Cendón, antigua concejal popular, y una de las voces críticas con la gestión de Elena Muñoz. Cendón, médico de profesión, ya formó parte de la lista con la que Porro se presentó a las municipales de 2011. A ambas se las volvió a ver juntas la noche del pasado lunes en los pasillos del Parlamento autonómico. Porro, en cualquier caso, tratará de aglutinar en su equipo a miembros de todas las sensibilidades. "La prioridad es unir", recalcó el pasado lunes.

Según pudo saber FARO, Porro también ofreció al exalcalde del PP Manuel Pérez formar parte de la gestora. Sin embargo, este declinó la propuesta al esgrimir obligaciones familiares y considerar que la gestora le quitaría demasiado tiempo. Otro de los pesos pesados históricos del partido, Carlos Mantilla, también recibió una llamada de Corina Porro para formar parte del nuevo órgano gestor, pero no ha trascendido si en su caso la respuesta fue positiva o también rechazó la oferta.

Para conocer el resto de nombres habrá que esperar a hoy, cuando la reunión de la junta directiva provincial del PP oficialice la constitución de la gestora y la elección de la antigua regidora, que ayer no solo aceptó el "reto" sino que, para facilitar el proceso, puso a disposición su cargo como presidenta del Consello Económico e Social (CES). "Es un órgano independiente y no quiero perjudicarlo", subrayó: "Quiero evitar cualquier tipo de malentendido que pudiera afectar a su funcionamiento".

La idea de la que fue alcaldesa de Vigo entre 2003 y 2007 es que la gestora esté formada por personas que sean representativas de las diferentes facciones del partido. Tampoco se descarta que se designe a algún nombre cercano a Elena Muñoz para facilitar la transición hacia una nueva etapa. En lo que respecta a la secretaría general, uno de los posibles nombres que se barajan es el de Lucía Molares, que fue concejala en Vigo a las órdenes de Corina Porro y que se alió en 2015 con Elena Muñoz para derrotar a Javier Guerra en el congreso del partido.

Estos movimientos responden al motivo de la elección de Corina Porro para ponerse al frente de la gestora: aunar las diferentes voluntades. Por ello prácticamente todos los pesos pesados vieron con buenos ojos el nombramiento de la exalcaldesa como presidenta de la gestora. Todos ellos además valoran el gesto de salir al rescate del PP vigués en el que es probablemente el peor momento de la formación en toda su historia.

Porro también volvió a desvincular su nueva experiencia con un regreso a la vida municipal. Esa etapa, dijo, "está cerrada", aunque sí se propuso tutelar un proceso "tranquilo" de transición tranquilo para que el PP "tenga tiempo" de mirar al futuro "sin urgencias". Todo ello, teniendo las complejas circunstancias que envuelven a la agrupación. "No admitir que la situación del partido es mala sería engañar a la gente", afirmó.

Tras la junta directiva provincial de esta tarde, la primera gran decisión de la nueva gestora será elegir a los cuatro concejales formarán el grupo municipal del PP en la corporación. Tendrá que darse prisa, pues el 15 de junio es ya el pleno de investidura, en el que los ediles tomarán posesión.

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