Se calcula que más de 60.000 gallegos padecen psoriasis. Una cifra que puede quedarse corta si se tiene en cuanta el infradiagnóstico. Y, a pesar de ello, resulta desconocida para parte de la sociedad. Acción Psoriasis y la Sociedad Española de Reumatología y el Colegio de Farmacéuticos de Pontevedra organizan mañana en Vigo (18.30 horas, en Camelias 78) una jornada para visibilizarla y para ofrecer información a pacientes y familias. "Es una enfermedad crónica, que vamos a tener toda la vida, y lo más importante es que los pacientes sepan que no están solos", señala la delegada de la asociación en Galicia.

-¿Qué es la psoriasis?

-Es una enfermedad sistémica, es decir, que afecta a todo el cuerpo, no solo a la piel, sino también a articulaciones y órganos internos. Conlleva mayor riesgo cardiovascular y de desarrollo de otras enfermedades, como inflamatorias digestivas o metabólicas. Es de carácter autoinmune. Tiene deferentes grados hasta el grave y puede ser desfigurante. Hay que ocuparse de ella sin preocuparse.

-¿ Qué se puede hacer para estar preparado o evitarlo?

-Se produce por brotes, así que la prevención es limitada. Hay predisposición genética -no es hereditaria- y tiene desencadenante: medicamentos, situaciones de estrés, enfermedades como infección de garganta... No se puede prever, pero si conocemos nuestra enfermedad y nos cuidamos, podemos evitar esos desencadenantes. Después, el tratamiento de la psoriasis no es solo durante el brote, hay que mantener la piel hidratada y llevar hábitos saludables.

-¿ La jornada va en esta línea de conocer la enfermedad?

-Sí. Tenemos intervenciones en los tres ámbitos principales: Dermatología, Reumatología y Farmacia. Se busca responder todas las dudas de pacientes o familiares: cómo se desencadena la enfermedad, qué tratamientos hay, cómo podemos controlarla?

-¿Cuáles son las principales preocupaciones de estos pacientes?

-Como la curación no existe, la principal es el blanqueamiento máximo de la piel o controlar al máximo los síntomas de la artritis psoriásica. Otra importante es la afectación psicológica, que es muy grande. Vivimos en una sociedad donde la imagen es muy importante y el paciente con una lesión en piel tiende a ocultar o dejar de hacer actividades. En la artritis, son pacientes jóvenes. Nos encontramos con gente de 25 o 30 años, e incluso niños, que no pueden desarrollar actividades habituales. Hasta hace pocos meses era un motivo de exclusión para fuerzas de seguridad, bomberos o el ejército. Hoy no hay discriminación institucional, pero sí en la sociedad por desconocimiento. La reacción de mucha gente es de rechazo antes de preguntar. La psoriasis no es contagiosa. Las jornadas son importantes para visibilizarla entre la sociedad.