"Hay que decirle basta ya al falso viguismo que presume de que Vigo va como una moto cuando cada año perdemos población y peso empresarial", arengó ayer la candidata del PP a la Alcaldía de Vigo, Elena Muñoz, en el mitin de cierre de campaña. Lo hizo durante una emotiva intervención que dedicó en buena parte a agradecer el apoyo recibido por su partido y su familia durante la campaña y en "cuatro años muy complicados". "No ha sido nada fácil hacer oposición en Vigo, enfrentarse a los insultos y desprecios continuados, a la soberbia de querer dejarnos de lado, aislarnos y arrinconarnos", dijo.

Muñoz puso "punto y final" a la campaña en el Tinglado del Puerto rodeada de las grandes figuras del PP gallego entre las que estaba el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, el líder provincial, Alfonso Rueda, el conselleiro de Sanidade Jesús Vázquez Almuiña, el titular de la Autoridad Portuaria, Enrique López Veiga o el delegado de la Xunta. Tampoco faltaron la diputada Ana Pastor, Corina Porro, Lucía Molares, Javier Dorado o Teresa Pedrosa.

"Vigo sois todos vosotros, no una persona, y eso tiene que quedar bien claro y debemos decirlo muy alto", aseveró la candidata, que pese a las encuestas que pronostican una caída de su partido pidió "no bajar los brazos ni dar nada por sentado hasta que se cuente el último voto".

"Vigo pertenece a los trabajadores de Citroën, a los del naval, a las asociaciones de vecinos, a todos y cada uno de nuestros mayores y nuestros jóvenes", reinvindicó para acto seguido recordar que "hablar de los problemas y las necesidades de Vigo no es antiviguismo, es decir la verdad".

Entre esas prioridades puso la nueva potabilizadora e ironizó con que Caballero "fue capaz de incluir en su folleto de campaña logros como la ampliación de Rande, la del Ifevi, la construcción de la depuradora o la estación de Thom Mayne". "Se pone las medallas de todo lo que ha hecho el PP porque ha sido incapaz de hacer nada, acabará poniendo en un folleto el hospital Álvaro Cunqueiro que tanto critica", pronosticó.

"Ya sabemos en qué consiste el modelo socialista y no lo queremos porque no es lo que la ciudad necesita para salir adelante. Queremos más empleo, más población, menos impuestos, un PXOM que atraiga a las empresas y un Vigo donde nadie se sienta diferente", reclamó.