Fue en el área sanitaria viguesa en la que, hace año y medio nació el movimiento "PACs en pie de guerra", y rápidamente se extendió por toda Galicia. Tras paros en octubre y noviembre, desde el pasado 7 de enero, su personal sanitario -médicos y enfermeras- está en huelga indefinida. Pero resulta imperceptible. Al ser un servicio de urgencias, los mínimos estipulados por el Sergas son del cien por cien. Ayer quisieron darle visibilidad. Iluminaron el conflicto con velas en una "vigilia" reivindicativa por los Puntos de Atención Continuada. Fue el pistoletazo de salida a las movilizaciones que protagonizará esta semana el personal de Atención Primaria del área de Vigo. Hoy y mañana todos los facultativos de los centros de salud están llamados a la huelga.

Ante el PAC de Taboada Leal -antiguo Hospital Xeral- se concentraron sanitarios de los ocho puntos de urgencias extrahospitalarias del área -en plantilla hay casi un centenar de trabajadores-, arropados por compañeros de Primaria, sindicatos y el presidente del Colegio de Enfermería, Carlos Fernández. Colocaron sus cirios ante la imagen del conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, crucificado bajo el cartel de "Menudo Cristo" y con un gerente del área viguesa, Félix Rubial, a sus pies, rezando. Pidieron la dimisión de este último y corearon "Almuiña, escoita, os PACs están en loita", entre otros lemas.

Reclaman "una mejora de la calidad asistencial, deteriorada por la sobrecarga laboral", la dotación de más personal, así como completar los equipos de seguridad. Denuncian que llevan "con los complementos de festividad y nocturnidad congelados desde el año 2010" y con "un cómputo de jornada que penaliza los períodos de incapacidad temporal y permisos retribuidos". Respecto a este último, subrayan que su petición está avalada por sentencias favorables del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. Este colectivo -con el que el Sergas también se ve en dificultades para encontrar facultativos sustitutos- reprocha que la Administración "continúa haciendo oídos sordos" a esta demanda y "regateando" los complementos.

Los trabajadores rechazaron la última oferta del Sergas y solicitaron una nueva reunión hace una semana. La Consellería de Sanidade, que también aboga por el diálogo, respondió ayer que ha aceptado "nueve de las once reivindicaciones" planteadas por los sindicatos y que mantiene su oferta.

Sanidade subraya que ha accedido a un incremento retributivo por la realización e noches, festivos y domingos en un 60% en 2020 y del 40% en 2021, lo que traduce en una media de subida de 2.000 euros anuales. Señala que también atendió la petición de equipos de protección individual y que se mejoró lo demandado por dietas.

Las protestas de los PAC se sucedieron en A Coruña, Pontevedra, Ourense, Santiago, Lugo y Ferrol. Con unas elecciones el domingo y la sanidad como segunda preocupación de los gallegos, el Sergas se enfrenta esta semana a protestas del personal de PAC, de los facultativos de Primaria y de los eventuales de Enfermería.