Nuevo cambio de dueño en una empresa viguesa del motor. El grupo vigués IZ cerró esta semana la venta de su división de automóvil, Izmar, a un holding inversor de origen gallego, una operación que incluye las plantas de Valadares (sede central), Vitoria y Madrid, con un centenar de trabajadores en plantilla. Con esta transacción, el grupo IZ consuma su salida del sector, precedida por la venta ya a finales del año pasado de sus instalaciones de Barcelona a la también viguesa Gaypasa, como avanzó este diario, y de su participación en las fábricas de México a su socio Marsan Transformaciones Superficiales.
Izmar está especializada en el desarrollo y fabricación de soluciones logísticas para la industria de automoción -trabaja para todos los constructores de coches instalados en España, excepto para Renault-, se constituyó en 1987 y en los últimos años ha atravesado "dificultades económicas" a raíz de la compra en 2014 de la planta de la auxiliar catalana Hugas, que no fue capaz de rentabilizar en parte por la carestía de la mano de obra, y de la presión cada vez mayor que ejercen las multinacionales en el sector: la práctica totalidad de sus competidores fabrican en países low-cost. Esta situación obligó a renovar a todo su equipo directivo -ahora encabezado por Alejandro Gutiérrez, nuevo director general-, a vender su planta de Barcelona a Gaypasa y a clausurar las instalaciones que tenía en Pamplona.
Esta semana el Grupo IZ ha dado un paso más con la venta de la totalidad de Izmar, que inicia una nueva etapa en manos de un grupo inversor de origen gallego presente en varias áreas industriales como las energías renovables, los revestimientos y el naval, según confirmaron fuentes de la compañía. La idea es potenciar la oficina técnica de Valadares, centrando la producción de subconjuntos en países low-cost, y manteniendo el ensamblaje en España con una mayor automatización de procesos y "elementos de alto valor añadido". El nuevo propietario acometerá las dotaciones de capital necesarias para que en los próximos meses la compañía recupere el pulso. A mayores, promoverá la entrada de Izmar en otros sectores generando sinergias con el resto de industrias en las que participa.
Entre los principales clientes de Izmar están el Grupo PSA, al que atiende desde Valadares y Madrid; Iveco, el Grupo Volkswagen, Ford, Nissan y Daimler. Al margen de esta operación de venta, el Grupo IZ ya había vendido el año pasado su participación en las plantas que conjuntamente con Marsan y FerreBaztan impulsó el México a su socio vigués: Marsan. IZ se centrará ahora en su división de construcción, Izcon, especialista en naves industriales (las nuevas plantas de Benteler en Mos y Eberspächer en Portugal son suyas, así como la ampliación del CTAG en Porriño y la red de concesionarios españoles de PSA Retail).
La de Izmar es una más en la larga lista de ventas de empresas viguesas de automoción a fondos, grupos de inversión o multinacionales del sector. Hace apenas unas semanas se hacía efectiva la venta de Viza, el mayor fabricante de armaduras de asientos de Galicia, a la filial de asientos del gigante canadiense Magna (Magna Seating Europe). Antes fueron Maviva, Dalphimetal, Copo, Ferroplast, Estampaciones Noroeste, Fundiyacto? Y fuentes del sector aseguran que otras compañías viguesas de saldo.
