Mañana caótica en Peinador. El vuelco de un camión de bomberos en la cabecera Norte de la pista obligó a cerrar ayer al tráfico aéreo el aeropuerto durante más de tres horas. Entre las 6.10 y las 9.30 h. no pudo tomar tierra ningún avión. En esa franja sí salió un Iberia con dirección a Madrid, pero con casi hora y media de retraso y después de que Aena tuviera todas las garantía de que el despegue se podía realizar con todas las garantías de seguridad. Según fuentes oficiales del gestor aeroportuario, el vehículo volcó durante la revisión diaria que realizan los equipos de extinción de incendios de la pista antes de la apertura al tráfico aéreo y por causas que todavía ayer se desconocían. El bombero que conducía el vehículo salió por su propio pie y fue trasladado a un centro hospitalario. Esta situación provocó una cascada de retrasos en el aeropuerto que llegaron a superar las tres horas y media y que afectaron a más de 1.500 pasajeros.

El accidente no solo se produjo en un punto conflictivo de la pista -justo en la cabecera- sino que además el camión acabó rompiendo varias balizas de señalización para el aterrizaje y dañó los circuitos eléctricos que las alimentan. Este incidente dejó inutilizado el sistema antiniebla durante más de seis horas. Por fortuna, la visibilidad a lo largo de la mayor parte de la mañana fue buena y, aunque con retraso, todos los aviones pudieron tomar tierra sin necesidad de apoyarse en el ILS. Si bien es cierto, un Iberia aplazó su despegue desde Madrid hacia Vigo por este motivo para evitar problemas de aterrizaje y no salió hasta que Aena consiguió dejar plenamente operativo el aeropuerto a las doce y media de la mañana.

A la zona tuvo que desplazarse una ambulancia, la Guardia Civil, efectivos de seguridad del aeropuerto y también dos grúas con las que se consiguió levantar el camión de bomberos. Pese a tener importantes daños, no fue necesario remolcarlo. Se trataba de un camión Rosenbauer Panther 6x6 con una antigüedad de 12 años y una capacidad de 10.000 litros de agua. "La última ITV la pasó en marzo de este año", aseguran fuentes oficiales de Aena. El gestor aeroportuario ha abierto una investigación para esclarecer los motivos del accidente.

El cierre del aeropuerto durante más de tres horas provocó una cascada de retrasos a lo largo de todo el día al verse afectados los primeros vuelos de la jornada desde Madrid de Iberia y Air Europa; pero también el Vueling de Barcelona. El primer afectado fue el que debía salir hacia Barajas a las 6.35 horas. A bordo iban 120 viajeros. El Iberia, con el camión de bomberos ya volcado sobre la pista, tuvo que retrasar su despegue 85 minutos.

Pese a lo aparatoso del accidente, el bloqueo del aeropuerto y la avería del sistema antiniebla, solo un avión se tuvo que desviar. Fue el Air Europa procedente de Madrid con 57 viajeros a bordo y que tenía que aterrizar al filo de las ocho de la mañana. Se fue para Santiago y los viajeros llegaron luego a Vigo en autobús con dos horas y media de retraso. En autocar a Lavacolla también fueron transportados las 118 personas que esperaban en Peinador para salir hacia Barajas en ese avión. "Nos sorprendió mucho que nos dijeran que no podíamos aterrizar porque había un camión de bomberos volcado en la pista. El retraso es un problema, pero lo importante es que no ocurriera nada grave", coincidían la mayoría de viajeros consultados.

Otro de los aviones afectados fue el de Barcelona que debía llegar a las 9.10 y no lo hizo hasta pasadas las diez de la mañana. El avión esperó en El Prat a que se resolviera el problema. Otro de Iberia, por ejemplo, estuvo más de una hora dando vueltas sobre Peinador con 122 viajeros a bordo hasta que se abrió la pista. Los retrasos, de entre una y tres horas y media, afectaron a 300 viajeros de Vueling (2 aviones); 383 de Air Europa (4 aviones) y 827 de Iberia (6 aviones). También se desvió un carguero.