Tras una semana de evaluación bajo la atenta y estricta mirada de tres auditores llegados de Chicago, Povisa reeditado su acreditación -y ya van tres- de la Joint Comission International, el certificado de calidad y atención sanitaria más prestigiosa a nivel mundial. El hospital concertado comparte solo con otros 13 centros de España este sello que acaba de recibir por parte del equipo internacional. Para ello evaluaron y revisaron al milímetro hasta 1.300 parámetros del hospital y, como novedad entre los requisitos de este año, se entrevistaron con una docena de pacientes que estuvieron ingresados este último año para conocer su historial clínico y sus impresiones sobre el mismo. "Aunque evalúa toda la organización, lo hace bajo una perspectiva sanitaria y clínica, evalúa solo los resultados y garantiza que es un proceso de mejora continua porque se va revisando cada poco tiempo. Siempre estás a la vanguardia", explica María Antonia Muñoz, directora de Calidad de Povisa.

Para la facultativa, se trata de la acreditación "más exigente" y la "más importante" a nivel mundial, además de ser "su hoja de ruta". "En el 2009 elaboramos los primeros programas de calidad y nos decantamos por este modelo, el de la Joint Comission International. Este año hubo que hacer cambios, pero más o menos estábamos en la misma línea. El último año fue complicado para el centro", destaca Muñoz, en relación al concurso de acreedores por las pérdidas de su concierto con el Sergas.

Esta es la tercera ocasión que Povisa ostenta esta distinción ya que cada tres años se realiza una nueva -y más restrictiva- revisión lo que obliga estar siempre en la búsqueda de los mejores diagnósticos y tratamientos. "Este años todavía fue más complicado que los anteriores porque además de venir tres auditores y evaluar absolutamente todo, desde historia clínica hasta infecciones o preoperatorio, si hubo infecciones, días de estancia, etc. Hacen una evaluación de 360 grados. Seleccionaron a 12 pacientes que estuvieron ingresados en el últimos año con patologías muy graves, pacientes oncológicos, con cirugías complejas, pacientes con deterioro cognitivo... Se reunieron durante 4 horas con ellos", amplió la directora de Calidad.

Las nuevas exigencias de la Joint Comission International, versaron también sobre la dispensación de medicamentos. El equipo auditor valoró que los médicos de Povisa dispongan durante sus visitas de toda la información sobre sus análisis, que les da pautas para una correcta administración y para la conciliación con otros fármacos que pueda estar tomando, lo que es fundamental para reducir la polimedicación -sobre todo en personas mayores- y evitar el riesgo de interacciones negativas entre distintos medicamentos.

Si bien en su fallo no plasmas los éxitos ni déficit de la asistencia de Povisa, sí superó todos los parámetros a estudio. "Valoran la superación de 1.300 valores, no se puede no aprobar. Te dan una puntuación de 0, 5 o 10; y aquí no se admite ningún 0 y si tienes algún elemento que no cumple del todo, tienes durante la evaluación, cinco días, para revisarlo y mejorarlo", explica María Antonia Muñoz. La facultativa destaca, entre muchos factores, la seguridad que el paciente encuentra en Povisa. "Tenemos montado un sistema de detección de alertas que nos hace ser más organizativos para prevenir la infección, un problema con un medicamento, que nos permite tener un proceso más seguro o diagnóstico más fiable...No estamos hablando de un servicio específico, sino de una estrategia", precisa.