En su último estudio sobre el alquiler de bajos comerciales, la Federación Galega de Empresas Inmobiliarias (Fegein) aportaba un dato rotundo: de todas las calles de la comunidad autónoma analizadas, Príncipe es, de lejos, la más codiciada por los negocios. Su análisis concluía que cada metro cuadrado de local comercial en la bautizada como "milla de oro" olívica cuesta 42 euros, muy por encima de los 13 del casco histórico de Santiago de Compostela o los 32 del paseo de Santo Domingo, en Ourense. El atractivo de Príncipe ha captado incluso el interés de las socimis, sociedades de inversión que hasta no hace mucho limitaban sus movimientos en la ciudad a las grandes áreas comerciales, como el centro comercial Gran Vía.
Esa posición privilegiada de Príncipe está a punto de reforzarse de forma considerable. Patrimonio acaba de dar luz verde al proyecto de reforma del edificio situado en el número 32 de la calle, un emblemático y amplio inmueble encargado en 1948 por el empresario Alfredo Romero a Antonio Cominges y que desde hace años alberga en su planta baja a la firma Cortefiel.
El proyecto es relevante no solo por la importancia de la construcción. Destaca también por el uso que se le pretende dar. La promotora que lo impulsa, Inversiones Vio Confort, invertirá unos tres millones de euros en rehabilitar el conjunto y poner en el mercado 13 exclusivos pisos con superficies que oscilarán entre los 150 y 290 m2. A esa oferta de vivienda se sumarán 15 despachos de entre 30 y 70 m2 situados en la parte trasera del edificio.
En total la superficie construida ronda los 5.500 m2. La promotora plantea la rehabilitación integral del inmueble, del que se conservarán la estructura y las fachadas. El proyecto -ideado por Jorge G. Herrero y José Melero, de OPV Arquitectura y coordinadores del estudio GEV Arquitectura- ha buscado no alterar la configuración y disposición original de viviendas. Para conseguirlo, han tenido en cuenta la superficie, tipología y la gran altura de los techos del diseño original de Cominges, de 1948.
En la parte trasera del edificio se plantea un centro de negocios con 15 despachos, que disfrutarán de varios patios interiores ajardinados y luz natural. En la planta baja se mantendrá el uso comercial que ha caracterizado al edificio durante los últimos años. De hecho, Cortefiel seguirá operando mientras duren las obras de reforma.
Una vez recibido el visto bueno de la Consellería de Cultura, la promotora está pendiente ahora de la autorización del Concello. El proyecto ya cuenta con el "ok" de la comisión del Plan Especial de Edificios a Conservar (PEEC), por lo que la promotora confía en que la licencia municipal no se demore. Según el cronograma que manejan los responsables de la reforma, las obras podrían arrancar ya a principios del verano, con lo que estarían rematadas a inicios de 2021. Inversiones Vigo Confort -la firma impulsora- pertenece a un grupo de empresas especializadas en la rehabilitación de inmuebles emblemáticos en Galicia, con proyectos en marcha en Vigo y A Coruña.
El edificio de Cortefiel no es el único que "renacerá" en la milla dorada de la ciudad. A solo unos metros -en Porta do Sol- la promotora Faneca Brava S.L. da los últimos retoques al inmueble Stella Príncipe, que recupera la edificación de 1876 que ocupaba el número 4 de la calle hasta su derribó en 2013. El complejo se destinará a uso comercial y dispone de 760 m2 repartidos en seis plantas. A principios de mes su propietario, David Otero, reconocía que varias marcas -entre ellas multinacionales- habían mostrado ya su interés en arrendar el Stella, que se oferta por 12.000 euros al mes.
Sin abandonar la calle Príncipe se encuentra otra actuación relevante: la construcción de un edificio para la marca Pull & Bear en una parcela que lleva años abandonada y tapiada. La construcción tendrá cuatro plantas y los planes de la promotora pasan por empezar las obras a lo largo de este año. A ese inmueble y el Stella se suma otro "fichaje" reciente de Príncipe: la sede del R.C. Celta.
