La pianista argentina Martha Argerich es su "ídolo" y verla o, aún mejor, hablar con ella, era la ilusión con la que se inscribió en el III Concurso Internacional de Piano Ciudad de Vigo, organizado por la Asociación de Música Clásica de Galicia. Y Giorgio Gigashvili no solo lo consiguió, sino que lo hizo como el ganador de esta edición del certamen. "Ser el primer ganador de una competición en la que Argerich lidera el jurado significa todo para mí", contaba ayer, tras asimilar la victoria, este joven de 18 años procedente de Tiflis (Georgia). "Ella es realmente una persona gigante, es mi pasión y no me podía creer lo que mis ojos veían. ¡Estaba hablando con ella!", recuerda emocionado horas después de un momento que recordará siempre.

Gigashvili fue preseleccionado entre los 381 pianistas de 53 países que aspiraron a participar en esta edición del certamen. Tocó en primera ronda junto a otros 89 de 33 nacionalidades. Rivalizó en semifinales con 23, porque el jurado fue incapaz de reducir la lista a los 20 que estaba previsto debido al gran nivel de los intérpretes. Y salió victorioso el sábado entre los cinco finalistas. Pugnó con Alim Beisembayev -21 años, Kazajistán-, que quedó segundo -premio "Galicia"-; Vasyl Kotys -34 años, Ucrania-, que se alzó con el tercero -galardón "Juan Montes"-; Priscila Navarro -24 años, Perú-; y Ronaldo Valdés -México, 28 años-, que sustituyó a Alexey Sychev -31 años, Rusia-, ausente por urgencia quirúrgica. Él era el más joven.

Conquistó al jurado por su "individualidad". El director artístico del certamen, el gallego Pablo Galdo, explica que Giorgi Gigashvili fue "muy destacado" desde la primera ronda. Cuenta que interpreta "muy diferente a lo que hacían los demás". "Hizo cosas fantásticas, que no habíamos escuchado nunca", destaca.

Para el georgiano, la importancia de ganar esta competición "no es tanto por el premio como por el jurado". Pero le sacará buen partido a la dotación económica del primer galardón -3.000 euros-: "Voy a hacer muchos conciertos alrededor del mundo para mi carrera profesional". También incluye otros mil euros para participar en el Festival de Piano de Costa Rica, 500 euros para la grabación de un disco, cinco recitales en España y otro en Nueva York.

Además, recibió el premio especial Nelson Freire, pianista brasileño que también integraba el jurado. A Gigashvili le "sorprendió" esta distinción y se confiesa "muy feliz ya desde ahora" con el concierto en el Teatro de Sao Paulo con el que está dotado.

Se va hoy de Vigo con un gran sabor de boca. "Fue una experiencia genial aquí. Adoro la ciudad, a la gente, la competición, la organización? Lo recomendaré, seguro". Regresará en la próxima edición para el concierto de ganadores: Será realmente un gran placer tocar aquí de nuevo".

Gigashvili termina este año el instituto en la capital de Georgia y estudia en la Escuela Central de Música Zakaria. El próximo curso se sumergirá de lleno en la interpretación ingresando en el conservatorio. También ganó el VI Concurso Internacional de Piano de Tiflis y la segunda edición del de Gershwin, en Nueva York. Cuenta que su sueño, y "quizá el de todos los pianistas", es ser un músico "famoso". "Y si eso no puede pasar, pues por lo menos poder vivir de tocar", señala.

El premio" Rosa Sabater", al mejor pianista español, quedó desierto en esta edición. Y tampoco se entregó el "Pepito Arriola" porque no hubo representación gallega. Varvara Kutuzova se hizo con el "Crisóstomo Arriaga", al mejor concursante menor de 20 años. Alim Beisembayev, además del segundo premio, recibió el especial del público "Martín Códax". La mejor intérprete de una obra de Bach fue Priscila Navarro, una de las finalistas. El jurado otorgó a Carla Román Vázquez el "Marcial del Adalid", al mejor intérprete de una obra de un compositor español. Entregó a Anna Khomichko el "Rosalía de Castro", a la mejor pianista de una obra de una mujer compositora. También realizó una mención especial a cinco músicos que, aunque no superaron la primera ronda, considera que destacaron: Sylvia Thereza, Lindsay Garritson, Elizaveta Kliuchereva, Anna Dmytrenko y Gabriel Sutkut.