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Una vida de lujo a base de engaños

-Cae en Peinador una pareja acusada de robar a ancianos simulando ser revisores del gas -Llevaban supuestamente un alto ritmo de vida y hacían gala de su opulencia en Instagram

El momento de la detención de la pareja por parte de la Guardia Civil en el aeropuerto vigués de Peinador. // FdV

Su destino era Punta Cana. Un más que apetecible plan vacacional en la República Dominicana. Nada que desentonase en estos días festivos si no fuera porque a esta pareja le pisaba los talones la Guardia Civil. Y los agentes acabaron frustrándoles el viaje cuando ni siquiera habían salido de Galicia. Los detenidos son dos jóvenes, un varón de 32 años, P.P.S., y una mujer de 29, I.M.G., presuntamente especializados en engañar y robar dinero y joyas a personas mayores haciéndose pasar falsamente por revisores del gas. Un particular modus operandi que supuestamente les permitía a llevar una vida de lujos de la que hacían gala en redes sociales como Instagram. Fueron arrestados en el aeropuerto vigués de Peinador, cuando aguardaban con sus maletas la salida del primer vuelo que los iba a llevar al Caribe. La realidad para ellos sin embargo será, al menos a corto plazo, muy distinta a la de ese destino de sol y playas. La jueza de guardia de Vigo decretó ayer su ingreso en prisión provisional.

El operativo policial que derivó en estos arrestos esta semana en Peinador fue llevado a cabo por agentes de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Ourense, que se encargaban de las pesquisas policiales y que contaron para las detenciones con la colaboración de efectivos de la comandancia de Pontevedra.

La investigación ya venía de atrás. La pareja, que actuó en diferentes puntos de Galicia, sobre todo en zonas rurales, simulaba dedicarse a la revisión del gas para engañar a personas de edad avanzada y entrar así en sus casas. Una vez dentro, informa la comandancia ourensana en un comunicado, se las ingeniaban para presuntamente sustraer joyas y dinero en efectivo. La Guardia Civil les atribuye 15 delitos de hurto en interior de vivienda habitada, otros tres de estafa y uno más contra la seguridad vial. En un registro domiciliario en la vivienda que habían alquilado en Vilagarcía de Arousa los agentes se incautaron de "gran cantidad de joyas" -como pendientes, collares y anillos-, 1.500 euros en efectivo, dos teléfonos móviles y pequeñas cantidades de estupefacientes. Concretamente, 4 gramos de cocaína y 20 gramos de hachís, junto a utensilios para manipular estas drogas.

Sin fianza

La causa contra estos jóvenes la lleva el Juzgado de Instrucción número 2 de Verín (Ourense), pero dado que los arrestos se produjeron en la ciudad olívica, ayer pasaron a disposición del tribunal de guardia vigués, el de Instrucción número 7. La magistrada, según concretaron fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), ordenó a última hora de la mañana su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza por la supuesta autoría de delitos de estafa continuada y hurto.

Las indagaciones de los robos de los que eran víctimas ancianos de distintos puntos de la comunidad acabaron situando la lupa policial sobre esta pareja, que supuestamente llevaba un elevado ritmo de vida gracias a sus dotes para el engaño. Viajes, estancias en hoteles caros, ropa y bolsos de marca o teléfonos de última generación. La investigación realizada atribuye esta opulencia a los botines que iban obteniendo. Y habrían hecho gala de ello en redes sociales como Instagram, colgando imágenes donde se podían ver limusinas, dinero en efectivo u otras escenas que denotaban lujo y ostentación.

El timo que presuntamente utilizaban, el de los falsos revisores de gas, no es precisamente nuevo. Como ocurrió en este caso, los estafadores que recurren a esta técnica suelen elegir como víctimas a personas mayores y prefieren el rural antes que las ciudades. Una recomendación que se suele dar para evitar estos engaños es que, ante cualquier sospecha de desconocidos que se presenten en un domicilio sin que sus servicios hayan sido solicitados, lo preceptivo es avisar a las fuerzas de seguridad.

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