El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia confirma la pérdida de oportunidad en el tratamiento de una mujer de 54 años con cáncer en una glándula salival y metástasis en el pulmón por suspender el Chuvi la quimioterapia al considerar que estaba estabilizada. Revoca, sin embargo, el fallo de primera instancia para elevar la indemnización a la familia de 30.000 a 50.000 euros y condenar de forma solidaria a la aseguradora Segurcaixa Adeslas.

La paciente fue diagnosticada e intervenida en Lleida en 2012 y, después, recibió quimioterapia. Cuando llegó a Vigo, en 2014, se le suspendió este tratamiento "en función de dos relevantes datos": la estabilidad que presentaba la patología y el buen estado funcional que mostraba.

El tribunal rechaza mala praxis y subraya que los médicos optaron por esta opción al creerla la "más beneficiosa" para la paciente y "conveniente" por la cantidad de quimioterapia que había recibido. Acepta el cálculo de la perito de una supervivencia del 30 o 40% a 5 años de haber continuado con las sesiones.