"No son privilegios ni alternativas, sino una necesidad". Familias con niños que presentan dificultades de aprendizaje, trastornos graves de conducta, alta capacidades o en general, necesidades educativas especiales (NEAE) denuncian la dureza y restricción a la hora de solicitar las becas del Ministerio de Educación. Sostienen que además del diagnóstico del Sergas o de un gabinete especializado, necesitan el certificado de discapacidad del menor para poder optar a ellas. "Tengo dos hijos, ambos diagnosticados como NEAE pero solo uno con el certificado de discapacidad, ¿por qué uno puede tener beca y el otro no? Los dos necesitan de estas ayudas", lamenta Paula Verde, una de las madres afectadas que acompañada por otros miembros de FOANPAS y otros colectivos del área denunciaron ayer la situación.

Otro de los criterios que alegan restrictivos es el umbral de la renta, que también se tiene . "Quedar excluidas de estas ayudas supone que no se pueda asumir el coste de las terapias que necesita el niño, sin las cuales no podrá desenvolverse personal, social o psicológicamente", lamentan estas familias, que destacan la importancia de desarrollar convenientemente sus habilidades sociales. Otra afectada es la familia de Lara Naya, quien tras cobrar hace dos años una indemnización por despido, este año no ha podido ser beneficiaria de la beca para su hijo . "Llevaba 5 años recibiéndola, y ahora, por esta situación no me la van a conceder", narra esta madre.

Esta cuantía supone una ayuda de 1.800 euros -900 destinados a logopedas y otros 900 a una reeducación pedagógica- "muy necesaria" para el correcto desarrollo intelectual de los menores. Los padres denunciaron que estos nuevos criterios redujeron en un 80% a los beneficiarios de las becas. "Los que somos rechazados ni siquiera nos explican el porqué, así es muy complicado recurrir", lamentan.