La Policía Local de Vigo ha detenido en las últimas horas a dos hombres, de 33 y 21 años de edad, respectivamente, por presuntamente agredir a sus respectivas parejas, informaron fuentes oficiales.
El primer episodio tuvo lugar en la madrugada de este domingo, sobre las 4:36h, en un domicilio de la calle Martín Lago. Allí, la Policía comprobó que una pareja estaba discutiendo en el interior de su casa, cuya puerta de acceso estaba abierta.
El detenido alegó que estaba discutiendo con su mujer, a la que no había tocado, y que solo había causado daños al mobiliario. Ella, en cambio, contó a los agentes que su pareja llegó borracho a casa, la despertó y comenzó a discutir, y que intentó calmarlo para que sus gritos no despertaran al bebé de ambos, que estaba durmiendo en una cuna en la misma habitación.
También indicó que él la zarandeó, la tiró contra la pared y comenzó a destrozar el mobiliario a patadas, al tiempo que la amenazaba gravemente, lo que, según dijo, es habitual cuando bebe alcohol.
Los agentes observaron que la mujer presentaba diversas lesiones, si bien ella declinó ser asistida por una ambulancia ante el miedo que le inspiran su pareja y su familia.
Horas más tarde, sobre las 15:14h de este domingo, se produjo el segundo episodio de violencia machista, esta vez en un domicilio en la calle República Argentina.
En esta ocasión, los agentes se encontraron con la puerta de la casa cerrada, a través de la cual pudieron escuchar cómo una mujer rogaba que no le pegaran más, que no era su culpa y que no había hecho nada malo.
Tras tocar a la puerta, la mujer primero argumentó que no podía abrir porque estaba desnuda porque acababa de salir de la ducha, y luego, que no encontraba las llaves. Los agentes escucharon cómo en voz baja el detenido le decía que no abriera.
Finalmente, la mujer abrió y los agentes vieron que tenía diversas lesiones en la cara y en una de sus muñecas, que ella justificó en una caída fortuita.
Sin embargo, acabó reconociendo que fue su pareja quien le había causado las lesiones, lo que es habitual, según dijo, y que si no lo ha denunciado es por temor a represalias.
El varón manifestó que había sido una discusión de pareja y que ella quería arruinarle la vida. En el momento en el que iban a trasladarlo a comisaría, amenazó a la chica, detallan las fuentes.
